Registro de la acción Invasión, 2001

GAC (Grupo de Arte Callejero)

Continuamos compartiendo materiales de exposiciones pasadas, en este caso lxs invitamos a ver el registro de la acción Invasión del Grupo de Arte Callejero – GAC, integrado por Lorena Bossi, Vanesa Bossi, Fernanda Carrizo, Mariana Corral y Carolina Golder.

En noviembre de 2017 el Parque de la Memoria presentó Liquidación por cierre, una exposición que dio cuenta de los veinte años de trabajo del GAC y sus prácticas artístico-políticas. Las acciones del GAC tuvieron siempre como escenario a la calle y estuvieron motivadas por la necesidad de apoyar y/o visibilizar la lucha de alguna minoría frente al abuso de poder o la violencia política. Así, su primera intervención fue en apoyo a la lucha de los docentes que ayunaban en la Carpa Blanca en 1997. 

En los años subsiguientes el GAC abordó la problemática del terrorismo de Estado, realizando junto a la agrupación H.I.J.O.S. los escraches a genocidas para visibilizar el clima de impunidad provocado por los indultos hacia fines de los años noventa. 

Para la exposición Liquidación por cierre se construyó en la Sala PAyS una gran instalación con andamios callejeros que ofició de soporte para los registros de las acciones realizadas por el grupo: afiches, imágenes, videos, fotografías, y su icónica señalética, también presente en el Parque, en la intervención urbana Carteles de la memoria, con la que el grupo ganó el Concurso Internacional de Esculturas en 1999.

Invasión se llevó a cabo en diciembre de 2001, y tuvo como objetivo denunciar la crisis política y económica que se vivía por entonces. Constó de dos etapas, en la primera se intervinieron afiches publicitarios de empresas, multinacionales y bancos del microcentro porteño con calcomanías producidas por el grupo que homologaban el código militar al empresarial. Se utilizaron tres íconos militares: tanque, misil y soldado, acompañados por una tabla de referencias donde se los comparaba con elementos del sistema empresarial vigente en ese momento. El tanque fue homologado a las multinacionales, el misil a los medios masivos, y el soldado al sistema de seguridad. La segunda etapa consistió en el lanzamiento, desde lo alto de un edificio céntrico, de diez mil soldaditos de juguete en paracaídas, el 19 de diciembre de 2001, horas antes del estallido de la crisis.

El registro muestra la lluvia de soldaditos cayendo hacia la calle. La gente, sin saber qué ocurre, se detiene a mirar el cielo y trata de agarrar alguno. La escena transcurrió a las cinco de la tarde del 19 de diciembre. Poco después, se declaró el estado de sitio, se produjo la huida del presidente, el corralito, el saqueo de los bancos a los ahorristas y las muertes injustas por la represión, todos eventos que oficiaron de disparadores de las futuras acciones del GAC.

Ésta, como muchas de las acciones del grupo, contó con la ayuda de compañerxs y organizaciones que, como ellas, conciben su trabajo como un proceso colaborativo.

“Como colectivo, nos reconocemos como parte de una genealogía de prácticas artístico-políticas que tuvieron lugar en varios países de Latinoamérica en el marco de la lucha contra el imperialismo y las dictaduras en los ‘60, ‘70 y ‘80; pero también, como parte de un movimiento que llega hasta el presente y se proyecta en las futuras resistencias.”

GAC (Grupo de Arte Callejero)

El GAC se formó en 1997, cuando algunas de nosotras éramos estudiantes de Bellas Artes, y decidimos agruparnos para trabajar y producir por fuera de los espacios tradicionales del arte, motivadas por la lucha docente de la Carpa Blanca. 

Al año siguiente, comenzamos a participar en los escraches de la agrupación h.i.j.o.s y, en 1999, nuestra obra Carteles de la Memoria fue seleccionada para ser emplazada en el Parque de la Memoria. 

Dos grandes líneas temáticas atraviesan principalmente nuestras intervenciones: por un lado, la denuncia de los crímenes de lesa humanidad cometidos por la última dictadura cívico-militar y la genealogía del genocidio en Argentina y, por otro, la lucha contra las políticas neoliberales. 

Por lo general, nuestros lenguajes se basan en la tergiversación de los códigos urbanos, considerando los aspectos locales y territoriales en su dimensión física, social y subjetiva. Nuestro trabajo retoma saberes populares y es de carácter anónimo, generado siempre a partir de procesos colaborativos. 

Como colectivo, nos reconocemos como parte de una genealogía de prácticas artístico-políticas que tuvieron lugar en varios países de Latinoamérica en el marco de la lucha contra el imperialismo y las dictaduras en los ‘60, ‘70 y ‘80; pero también, como parte de un movimiento que llega hasta el presente y se proyecta en las futuras resistencias. 

Hemos participado en exposiciones y actos institucionales en varios países, entre los cuales cabe mencionar: la 50° Bienal de Venecia (2003); Ex Argentina, Museo Ludwig, Colonia, Alemania (2004); Cartografías Disidentes, seacex (2008-2009); festejos del Bicentenario, Buenos Aires (mayo 2010); Panteón de los Héroes, Fundación Osde, Buenos Aires (2011); Nuevas Realidades Video-Políticas, ciudades de España y América Latina (2012-2013); Cartografías Poéticas de la Memoria, Centro Cultural Haroldo Conti, Buenos Aires (2012); Disobedient Objects, Victoria&Albert Museum, Londres (2014); Resistance Performed, Migros Museum, Zurich, Suiza (2016). En 2009 publicamos el libro Pensamientos, prácticas
y acciones del GAC, Ed. Tinta Limón.

Registro de la acción Invasión, 2001 
Video super 8
Duración: 3′ 47”

Registro de la acción Invasión, 2001 
Video color
Duración: 5′ 14”

CONFERENCIA

Exhibiendo la ausencia y la pérdida:
10 principios curatoriales

por Joanne Rosenthal


Parque de la Memoria – Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado.
Buenos Aires, Argentina.
El workshop se realizó en el marco del proyecto de investigación Staging Difficult Pasts (stagingdifficultpasts.org), financiado por el Arts and Humanities Research Council (AHRC) del Reino Unido.
Bryce Lease, Principal Investigator
Maria M. Delgado, Co-Investigator
Michal Kobialka, Co-Investigator
Cecilia Sosa, Postdoctoral Researcher

Joanne Rosenthal es curadora independiente y consultora museística con enfoque en exhibiciones y proyectos que trabajan sobre pasados “difíciles” y narrativas marginalizadas.

Hasta 2018, fue curadora principal y jefa de exposiciones del Museo Judío de Londres, donde fue responsable de producir algunas de sus exposiciones más famosas, entre ellas Jews, Money, Myth (2019).

por Cecilia Sosa

Postdoctoral Researcher

Proyecto Staging Difficult Pasts:
Of Narratives, Objects and Public Memory

Un repensar radical para abrazar la ausencia

¿Cómo mostrar lo que falta, o lo que queda sin ver? ¿Cómo hacer visible la presencia de la ausencia? ¿Cómo personalizar la pérdida? El workshop “Exhibiendo la ausencia y la pérdida:  objetos, narrativas y trauma” que la curadora independiente y consultora museística Joanne Rosenthal brindó en el Parque de la Memoria el 23 de noviembre de 2019 estuvo enmarcado en el proyecto Staging Difficult Pasts. Este programa de investigación transnacional con sede en Royal Holloway (Universidad de Londres) busca examinar qué nuevos diálogos es posible establecer entre el teatro contemporáneo, la curaduría y los sitios de memoria en Argentina, Polonia, Lituania, España;  países que comparten experiencias disímiles de “pasados difíciles”. 

La idea de invitar a Joanne Rosenthal a Buenos Aires surgió en junio de 2018 recorriendo la muestra Blood. Uniting and Dividing [Sangre. Lo que une y divide] en el Museo Żydowskie Galicja de Cracovia. La exhibición, curada inicialmente por la especialista para el Museo Judío de Londres, y que luego viajó al Museo Polín de Varsovia y a Cracovia, era tan imponente como provocadora. Blood proponía un recorrido por la historia cultural del judaísmo a través de su relación con la sangre, incluyendo los rituales de la Biblia hebrea, la circuncisión, la eugenesia, la ciencia racial, la propaganda nazi, la genética y hasta el vampirismo. Sin embargo, al pasar de sala en sala por el pequeño museo en Cracovia no podía dejar de notar una ausencia: los modos en los que la experiencia posdictatorial argentina con su linajes familiaristas devastados por el terror, sus filiaciones extendidas, sus pruebas de ADN y test de abuelidad habían resultado en un espectro de paradojas sanguíneas que cuestionaban la definición misma de familia, identidad o filiación. La ausencia de aquel “capítulo argentino” en la muestra original resultó entonces una promesa para el encuentro. 

El workshop que Joanne Rosenthal terminó diseñando para el Parque de la Memoria se extendió mucho más allá de los designios sangre. Dirigido a artistas, curadores, activistas y trabajadores de la memoria y de los derechos humanos, apareció como un conjunto de herramientas, tan experimental como inspiradora, casi una suerte de toolkit conceptual y metodológico para poner en escena pasados conflictivos en diálogo con cuestiones de identidad, diversidad y filiación. Centrado en 10 principios o invitaciones metodológicas, el workshop logró exponer narrativas y objetos a través de los cuales artistas y curadores de museos y galerías del mundo habían logrado poner en escena formas diferentes de la ausencia y la pérdida a través de recursos creativos y no necesariamente costosos. 

Mientras la pandemia mantiene museos y galerías a puertas cerradas, el proyecto Staging Difficult Pasts trabajó con el equipo curatorial del Parque de la Memoria para traducir aquel workshop a un formato digital. Así, los 40 minutos de charla original se presentan aquí editados y compilados para permitir que el material de aquel encuentro de noviembre de 2019 circule entre públicos ampliados. 

Los casos presentados por Joanne son tan novedosos como diversos. Desde efímeros memoriales a cielo abierto hechos de frágiles tazas de café para conmemorar todos los años la Masacre Srebrenica en Bosnia, a los marcos vacíos que Sophie Calle montó en el Museo Isabella Stuart Gardner de Boston para señalar una esperanza de retorno. Desde un DJ tocando rodeado de espejos que ocultan un miembro fantasma, a la secreta vigilia cómplice que impone el Museo Judío de Viena a su público mientras recorre una exhibición de máscaras que llevan los rasgos anónimos de aquellos que perecieron durante el nazismo. 

A veces escalofriantes, otros luminosos, los principios que inspiraron el workshop también son una invitación a no descartar el humor y lo mundano en la puesta en escena de la pérdida. Así, el recorrido incluye un paseo por el Museo de las Relaciones Rotas (Croacia), que ostenta en su colección una plancha como el único objeto que sobrevive a una boda y una “tostadora de la vindicación” secuestrada pos ruptura y con la que se amenaza a un antiguo compañero de que no volverá a toast [brindar]. Así también, los frascos con senos extraídos quirúrgicamente donados al Museo de Transología (Inglaterra) por alguien que ya no los necesita son acompañados por una etiqueta donde se lee “thanks for the mammories” [gracias por las mamorias].

El compilado también ofrece un recorrido por la reconstrucción que hizo el MACBA de Barcelona de una exhibición organizada en 1978 en solidaridad con Palestina, donde la obra de más de 200 artistas fue totalmente destruida durante la guerra en el Líbano. Asimismo es un llamado a dejar que las voces de los ausentes hablen por sí mismas, como la colección de objetos tan cotidianos como menores reunida en secreto por los habitantes del gueto judío de Varsovia que nos interpela hoy con la urgencia de un grito lanzado al vacío. El recorrido finaliza con una experiencia personal de la curadora mostrando cómo incorporar las propias críticas dentro de la puesta de una exhibición. 

De este modo, el material del workshop reunido en su versión digital parece recordarnos cómo las formas de poner en escena la ausencia y el trauma serán siempre conflictivas y escritas en plural. Y, aún más, que estas puestas necesariamente involucrarán decisiones estéticas y éticas, que también pueden resultar en demandas de acción para sus públicos diversos y transnacionales. De este modo, esta colección de principios enunciados por Joanne Rosenthal en aquel encuentro busca circular entre audiencias ampliadas, para inspirar nuevas acciones e intervenciones, presenciales o digitales, que apuesten a un uso creativo de las limitaciones y la oportunidad en el sentido más radical. Así, en tiempos de crisis y pandemia, este workshop-toolkit nos ofrece nuevas oportunidades para un repensar radical,  casi una ventana para imaginar y poner en acto sueños curatoriales que abracen la ausencia.  

Bestiario de India's

de Adriana Bustos

Bestiario de India’s, 2020
Acrílico, gouache y hojas de plata s/tela 
200 x 200

Entre las numerosas crónicas que se escribieron durante el siglo XVI con objeto de acercarse al “Nuevo Mundo”, el proyecto de Adriana Bustos añade una retórica particular. En sus obras, la artista viaja de acá para allá, yendo y viniendo, como una cronista, pero elude la orientación antropológica de la mirada. O más bien, habilita una visión más torpe, especulativa o imperfecta si se quiere, que actúa de manera simultánea. Lo importante para su práctica es expandir la concepción que la historia moderna asignó al saber científico. No para clausurar aquella metodología, sino para crear imágenes que amplíen el universo que configura el texto escrito y propongan narrativas transversales.

Bestiario de India’s es, formalmente, un planisferio: una serie de dibujos que fueron realizados por los cronistas del siglo XVI al llegar a América y que Bustos reconstruye generando un gran ecosistema de seres fantásticos y animales monstruosos. Este montaje es un recurso que actúa como mapa . Un gran atlas que integra tiempos y espacios dispares donde la artista agrega conceptos, imágenes y relatos que no se corresponden con el ciclo lineal que la Historia describe, sino que instaura una nueva genealogía de los hechos.            

Bustos excava en la concepción histórica de la cultura que cristaliza como verdad o certeza ciertos acontecimientos del pasado. Los discursos totalizadores son atravesados por nuevas miradas que perforan aquel andamiaje: echar un vistazo a lo que a simple vista no aparece —o cuyo origen es impreciso—, considerar tiempos incongruentes y espacios distantes, hacer tambalear la arquitectura compacta del relato histórico para desentrañar enigmas e imaginar nuevos horizontes de investigación. En la obra de Bustos la imaginación se presenta como uno de los seis sentidos.

Las imágenes con figuras que transgreden los órdenes de lo natural se enhebran en un mundo alucinatorio de sueños. Esa mirada exuberante, inscrita en los bestiarios medievales, permitió ampliar el catálogo de bestias a partir de las crónicas de fauna y flora en América: la crudeza de un mundo desconocido impulsado por la fascinación pero también por el espanto y el deseo moralizante. Un gran elenco de monstruos habita en espacios flotantes donde el tiempo parece frágil, especialmente cargado de misterio, como un mundo cerrado en su propia lógica. Bestiario de India’s estructura en imagen lo que la palabra manifiesta en escritos. Es un texto de carácter visual sobre cómo acceder, figurar y fantasear con lo desconocido.

Gonzalo Lagos

Adriana Bustos nació en 1965 en Bahía Blanca, Argentina, actualmente vive en Buenos Aires. Estudió Arte y Psicología en la Universidad de Córdoba. A través de Becas del Fondo Nacional realizo clínicas con Marcia Schwartz, Mónica Girón y Fabiana Barreda; participó del Programa para Artistas Visuales del Centro Cultural Rojas, de la Fundación Antorchas  y Programa Inter-campos de la Fundación Telefónica. Realizó residencias en Buenos Aires ( Basilisco y RIIA ) en Reino Unido ( Oxford y Brigthon), en Saigón y Berlín. Participó del programa LARA 1 Latin America Roaming Art en Honda, Bogotá. Dentro de sus exposiciones individuales recientes se encuentran:  Vision Machine, Frieze New York, Museo del Barrio, 2020; El retorno de lo reprimido, Fundación Klemm, 2019; La Máquina de Visión, Galería Nora Fisch, 2018; Prosa del Observatorio, MUSAC (Museo de Arte Contemporáneo de Castilla y León), España, 2017; Quién dice qué a quién, Galería Bacelos, Madrid, 2016. Recientemente participó en Dakha Art Summit, Bangladesh, 2020; Cosmólpolis 2, Centro de Arte George Pompidou, Paris 2019. En los últimos años ha participado en la 14 Bienal de Sharjah 2019, UEA; en la Bienal de Montevideo en 2019 y 2014; Site Santa Fé, USA; XI Bienal de Estambúl, Bienal de MedellínBienal del Fin del Mundo, 2009; V Bienal de Mercosur, Brasil  y Bienal de Rennes, Francia. 

Algunas de las distinciones recibidas: primer premio Federico Klemm; primer premio Chandon, primer premio fotografía Fundación OSDE, segundo Premio Chandon, mención Chandon, mención Fundación Andreani, tercer premio Benito Roggio. 

Colecciones: Museo Reina Sofía; Fundación Kadif, EE.UU; Fundación Bienal de Sharjah, EAU; Fundación Arco Madrid; Banco de la República de Colombia; Museo MALBA; Museo de Arte Moderno de Buenos Aires; Foundation Aciacity, Singapour; Fundación Federico Klemm, Fundación OSDE, Museo de Arte Contemporáneo de Lisboa, Museo de Arte Moderno de Medellín, Fundación Cassa di Rizparmio, Módena , Museo de Arte Contemporáneo de Rosario entre otras.

La Historia y sus enunciados configuran modelos de sentido que van anclando nuestro presente por su efecto de verdad, pero a pesar de ello la Historia no es un discurso totalizador. Contiene en su estructura espacios vacíos, contradicciones, quimeras, lugares de ensoñación, territorios inconscientes y alucinaciones. 

Son también vacíos estratégicos en el sentido en que esos mismos vacíos abren un espacio que hace posible la identificación y la apropiación a nivel del sujeto. Los monumentos y los discursos políticos pueden ser ejemplos de su porosidad. Al mismo tiempo que fortalecen y profundizan la ideología, se basan precisamente en estos vacíos estratégicos que pueden subvertir en algún momento la ideología y la autoridad que los sostiene. 

Ir en busca de estas grietas supone sacudir los patrones de conexión preexistentes, conocidos y reacomodar esa información dentro de nuevos patrones. 

Toda práctica artística que tome como materia a la historia supone el trabajo de cortar, unir y diseñar. Un poco el trabajo de una costurera. Algo similar a la costumización. Una manera gráfica de historiografiar consistiría en empalmar contexto con contexto y ellos con nosotros. No se trata de un “contexto” como lugar sólido y seguro donde implantar información sino como otra manera de conectarse que abarca tiempos incongruentes y espacios distantes. Contextualizar debería admitir nuestra presencia, nuestra mirada, nuestro desconcierto y nuestra confusa comprensión de la historia. 

La operación quizás provoque nuevos efectos de verdad es decir la posibilidad de pensar en múltiples historias. 

Los Bestiarios de Indias y los relatos de los cronistas advenidos al mundo americano parecieran sumergirse en el mundo alucinatorio de los sueños. Hombres y mujeres, plantas y flores, piedras y paisajes se funden en enigmas que intentan ocultar y revelar los deseos, las fantasías y los terrores de la humanidad. 

Desde los bestiarios medievales se ha intentado reordenar lo desconocido y darle sentido a lo inexplicable. La tradición de esta mirada exuberante se inscribe en la Edad Media y podría decirse que las crónicas de la fauna y de flora americanas suponen una ampliación de las listas de las bestias medievales; pero creo que estos bestiarios americanos tienen entidad y méritos suficientes como para no rebajarlos a puro recuerdo de otra época y de otra escritura. 

Los bestiarios medievales aparecen en Europa entre el siglo XI y XII y se transforman en un especie de enciclopedia popular. Además de entretener, cumplen una función didáctico-moral. Un repertorio de animales que sirven como ejemplo para los sermones religiosos o para la construcción de una conducta moral. Podría considerarse casi un género literario si tenemos en cuenta que el término “Historia” en tiempos medievales no solo comprendía los hechos de los hombres (más parecido a una crónica) sino que además el concepto abarcaba otros grupos de conocimientos relacionados. La historia divina dedicada a Dios, la eclesiástica dedicada a la institución Iglesia y luego a la Historia Natural de plantas, animales, minerales y suelos. En este sentido el término Historia significaba mas bien “investigación y estudio” poniendo el acento en la experiencia del observador con todo su bagaje experimental, especulativo e imaginario. 

Esta actitud de historiador-cronista impregnó el relevamiento americano de las nuevas bestias alucinadas. 

Cabe recordar que la descripción de la fauna americana fue una tarea de exploradores, soldados, funcionarios y religiosos. La mayoría de los exploradores llegaban al continente por su “costa y misión”. Significa que solventaban ellos mismos los gastos de la expedición y contar con un cronista personal que fuera documentando sus acciones suponía la posibilidad de que luego la corona europea los recompensara por lo realizado. 

Los animales alucinados de los cronistas de indias son imágenes de la fascinación y el espanto que parecen contradecir los sentidos y frenar el pensamiento. Son imágenes de la ambigüedad de lo indeterminado, de la crudeza de un Nuevo Mundo en contraposición a la civilización y también imágenes que habrán respondido a las expectativas de un Nuevo Mundo a descubrir e incorporar (la probabilidad de un Edén en la tierra corroboraría contenidos bíblicos).

Es interesante la humanización como una constante en las representaciones de monstruos, gigantes, pigmeos, sirenas y seres mixtos que nos hablan de la relación del hombre con la naturaleza y con la cultura de la época y nos invitan a reconocer su vigencia de la mirada antropocentrada, de la naturaleza, en nuestra propia cultura y en lo que creemos ser.

Adriana Bustos

''Pira de los Bienes Culturales'', de Tótem & Tabú

#ElParqueDesdeCasa

Entre junio y octubre de 2019, en el marco de BIENALSUR,  el Parque de la Memoria presentó  Piras. Historias de brujas, una exposición del colectivo de artistas Tótem & Tabú, integrado por Laura Códega, Malena Pizani y Hernán Soriano. Partiendo de la figura de la bruja, la exposición se propuso echar luz sobre aquellos conocimientos, prácticas e ideologías implementados por mujeres y que fueron censurados por la historia oficial, invitando a pensar de qué modo esta invisibilización sobrevive aún en la actualidad.

La muestra se organizó a partir de un conjunto de siete “piras” que incluían obras de diversos formatos. En esta oportunidad compartimos la Pira de los bienes culturales, en la que, a partir de un collage audiovisual, se percibe el modo en que la cultura de los medios masivos ha colaborado en la difusión del estereotipo de la bruja. Así, a través de diferentes fragmentos de películas, series populares, videoclips, y videos caseros vemos un desfile del imaginario clásico de la hechicera: mujeres con poderes sobrenaturales, pervertidas, sanguinarias o malvadas, en definitiva, mujeres que representan el reverso de la mujer sumisa y maternal postulada por el discurso patriarcal.

Como señala la Dra. en Estudios de Género Malena Nijensohn —invitada especialmente a  escribir un ensayo para esta muestra— “no hay un único relato sobre las brujas y acaso allí resida también algo de su potencia política, en esa insistencia de las figuraciones que pide nuevas escrituras y re-escrituras”. Finalmente, “lo que enlaza a todas estas brujas es que, de una manera u otra, están en los márgenes de los roles esperables y desde allí desafían algún aspecto del orden instituido”.

Tótem & Tabú es un grupo conformado por Laura Códega, Malena Pizani y Hernán Soriano que trabaja desde el 2014 realizando investigaciones y obras sobre temas vinculados al origen de ciertas prohibiciones. Su interés se centra en analizar las estructuras de poder, así como aquello que está prohibido o es señalado como tabú o herejía.

#ElParqueDesdeCasa

Acompañamos la cuarentena compartiendo videos, artículos y otros contenidos relacionados con arte, memoria, educación y Derechos Humanos.

Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política.

de Alicia Herrero

Audiencia pública, 2019. Registro de performance realizada durante la exposición de Alicia Herrero Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política. Duración: 39’ 22’’

¿Qué papel juega la economía política en nuestras vidas? Partiendo de este interrogante, Alicia Herrero presentó una exposición en el Espacio Base de Datos del Parque de la Memoria, entre marzo y mayo de 2019. Bajo el título Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política la muestra tomó como punto de partida la estructura performativa de un juicio, buscando construir nuevas formas de visualidad y de percepción sobre el accionar del sistema económico conocido como “capitalismo neoliberal” y su dramática gravitación sobre nuestras condiciones de existencia.

Así, empujando los límites de lo que puede o no ser representado jurídicamente, la sala de exposiciones se transformó en un “tribunal” que recibió testimonios y acusaciones durante el transcurso de la muestra.

“El Capital es una cultura que aparece como naturaleza y su ley se nos antoja tan fatal como la ley de gravedad” advierte Eduardo Grüner desde el lúcido prólogo que acompañó la exposición. ¿Será posible cuestionar la ley del Capital para ponerla al servicio de la gente? Ensayos sobre un tribunal se propone desnaturalizar el modo en que se construye valor en el marco del actual sistema económico, como sabemos, a través de la generación de desigualdad. 

En esta oportunidad presentamos tres videos, dos de los cuales formaron parte de la muestra y un tercero que es un registro de la Audiencia pública en clave performática realizada durante la exposición, en la que se contó con invitadxs especiales convocadxs por la artista para dar testimonio.

Apertura

Apertura, 2019
Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política

Video
Duración: 7’ 50’’

Acusación

Acusación, 2019
Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política

Video
Duración: 21’ 47’’

El Parque de la Memoria agradece profundamente a lxs artistxs por su generosidad desinteresada al autorizarnos a compartir estos contenidos en nuestra página web y redes sociales.

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GALERÍA DE IMÁGENES

Paisajes de la Memoria

de Norberto Puzzolo

Compartimos en esta ocasión una selección de imágenes de obras de Norberto Puzzolo que formaron parte de la exposición Paisajes de la memoria, llevada a cabo en la Sala PAyS entre marzo y mayo de 2013 con curaduría de Adriana Lauria.

Desde sus inicios en su Rosario natal en los años 60, la obra de Puzzolo evidenció una preocupación cada vez más pronunciada por ampliar los límites de aquello considerado como artístico; por mover al espectador del cómodo lugar de observador pasivo; por sacar al arte del circuito cerrado de las instituciones artísticas oficiales. 

Es así que, siguiendo este mismo ideario, formó parte del Grupo de Arte de Vanguardia, agrupación de artistas que buscó renovar el campo de acción de la plástica y la cultura del momento. Con el transcurso del tiempo, el desarrollo de sus obras, acciones y discusiones, el grupo fue radicalizando sus planteos, buscando no sólo renovar el campo de la plástica, sino lograr, a través de la acción artística, una profunda transformación de las estructuras de la sociedad.

En 1968 un grupo de artistas de Rosario y Buenos Aires —entre lxs que se encontraba Puzzolo— acompañadxs por un equipo de investigadorxs y periodistas, llevó a cabo la obra colectiva Tucumán arde. El propósito fue la realización de una campaña de contrainformación para denunciar las duras condiciones de vida de lxs trabajadorxs de los ingenios azucareros de Tucumán durante la dictadura de Juan Carlos Onganía. Ese mismo año, Puzzolo presentó, dentro del denominado Ciclo de Arte Experimental, una instalación que hoy es conocida como “la obra de las sillas”. En ella se conjugaron una serie de factores que el artista venía trabajando en obras anteriores: en el espacio expositivo Puzzolo dispuso una serie de sillas plegables orientadas hacia la vidriera que daba a la calle. Las personas que concurrieron a la inauguración se sentaron en esas sillas, sin saber qué era lo que iba a suceder. Pero la obra justamente era esa: lxs espectadorxs fueron corridxs de su lugar habitual de observadorxs distantes y pasivxs para ser ellxs mismxs vistxs como objetos exhibidos, generando así un diálogo entre el entre el espacio del arte y el espacio urbano. La localización de la instalación en este caso también resultaba significativa: frente al espacio de exposición se encontraba el bar Iberia, lugar de reunión habitual de la intelectualidad rosarina. 

Ahora bien, ¿por qué la exposición se tituló Paisajes de la memoria? ¿Acaso la memoria está compuesta de capas de sentido y temporalidades que se van entremezclando entre sí? La icónica instalación de las sillas —que desmaterializó la obra de arte tornándola concepto— incidentalmente capturó también en las imágenes que la registraron un sitio importante para la intelectualidad rosarina como fue el bar Iberia. Ese mismo bar, en 1974, fue baleado en un atentado y fue el propio Puzzolo quien, en su rol de reportero gráfico, capturó con su cámara las huellas de la vidriera perforada por los disparos. 

Así, en la obra de Puzzolo varias capas de sentido se superponen y la cita a su propia producción anterior funciona como estrategia: en la serie Paisajes residuales (2012) nos encontramos con las mismas sillas que utilizó en su instalación de 1968, solo que aquí las sillas están vacías y ubicadas en entornos naturales, solas en la inmensidad, como signos de una imborrable ausencia.

GALERÍA DE IMÁGENES + VIDEO

LO QUE PUEDE UN CUERPO

Tamara Grinberg

Desde el Área de Arte del Parque de la Memoria compartimos el trabajo Lo que puede un cuerpo de Tamara Grinberg. Este ensayo realizado entre 2016 y 2019, da cuenta del estado de deterioro actual del predio que pertenecía a la Fundación Felices Los Niños, una obra solidaria que estuvo a cargo del Padre Julio César Grassi, condenado y encarcelado por abuso sexual y corrupción de menores.

El caso tuvo una presencia excesiva en los medios, tanto en los años 90, cuando el sacerdote se paseaba por los programas anunciando su obra de caridad, como a partir del año 2001, luego de que fuera denunciado. En 2002 la situación fue difundida públicamente por una investigación de la periodista Miriam Lewin. Así, quedó grabado en la memoria colectiva como un caso más de la corrupción e impunidad que marcaron la década del 90.

En 2016 Tamara comenzó a trabajar como docente de arte en una de las escuelas que actualmente funcionan en el predio de la ex Fundación Felices Los Niños en Hurlingham, hoy perteneciente al Estado. Allí se encontró con una situación inesperada, en su primera entrevista con la directora de la escuela, se podía leer un cartel que anunciaba “Padre Grassi Inocente”, a pesar de que la sentencia contra él ya estaba firme. Esta creencia en su inocencia también estaba presente en algunxs alumnxs que habían tomado la comunión con Grassi, y en sus familias.

No solo esto era llamativo, sino también el estado de abandono y decadencia del espacio, un predio de 65 hectáreas que además de gigante e inabarcable, tenía animales muertos, árboles caídos, y objetos abandonados. El lugar incluía una virgen de 3 metros de alto, una capilla intacta pero sin uso que aparentemente cuidaban los antiguos empleados de la fundación, galpones, camionetas, vagones, la oficina de Grassi, el Hogar Los Juanitos, donde habían dormido lxs chicxs de 6 a 12 años y el sitio para lxs adolescentes incendiado.

Un espacio en ruinas, con marcas de un pasado que convive con el presente, y genera confusión. En ese contexto de impunidad Tamara se planteó la necesidad de registrar el predio y señalizar de algún modo que allí ocurrieron violaciones a los derechos de lxs niñxs, entre otros delitos cometidos por Grassi. En sus palabras: “Quería registrar las sensaciones, más que hacer un registro de cómo estaba el lugar, y cómo se estaba cayendo abajo, era esta sensación de ahogamiento, de encierro, de silencio y mucha violencia simbólica.”

El corpus de este trabajo está conformado por fotografías que simbolizan estas sensaciones, y proponen construir una memoria de lo ocurrido. A su vez, se completa con un video donde las fotografías se contraponen con imágenes de archivo que contextualizan la historia.

“Hoy, Grassi se encuentra en la celda 16 del pabellón 6 de la Unidad Penitenciaria N° 21 de Campana. Condenado con sentencia firme a 15 años de prisión por 17 cargos de abusos deshonestos contra tres niñxs que tenían 9, 13 y 17 años cuando se produjeron los hechos. Grassi negó sistemáticamente todas las acusaciones. Ya estando preso fue condenado a dos años más de prisión por el delito de malversación de fondos de la Fundación y por el desvío de las donaciones al penal de Campana. En noviembre de 2017 le redujeron la pena con el beneficio del 2×1. Juan Pablo Gallego, fiscal y abogado querellante en la causa presentó la apelación. El 13 de febrero de 2019 Grassi fue incluido en el registro de violadores. En el 2026 quedaría en libertad pudiendo ejercer como sacerdote.“ (Miriam Lewin)

Este ensayo deja constancia de ese pasado oscuro con la intención de no olvidar y fundamentalmente de que no vuelva a ocurrir otra violación de los derechos humanos. Sin embargo, la situación judicial actual, exige la visibilización de lo allí sucedido.

GALERÍA DE IMÁGENES

Sombra del cóndor

João Pina

En diciembre de 2015 se presentó en la Sala PAyS la exposición Sombra del cóndor, un ensayo fotográfico realizado por el artista portugués João Pina.

Pina, que nació en Lisboa en 1980, es nieto de presxs políticxs de la dictadura de Oliveira Salazar, y ha realizado su primer libro acerca de esa experiencia. Finalizado ese trabajo, se interesó por la historia de la “Operación Cóndor”, nombre con el que se conoce a la cooperación represiva a escala regional entre las cúpulas de los regímenes dictatoriales de Argentina, Chile, Brasil, Bolivia, Paraguay y Uruguay. En palabras de Pina: “Me interesó porque enseñaba la dimensión de lo que ocurrió. El hecho de que seis países se hayan reunido a hablar de este tema y a trazar un plan de aniquilación de la oposición política me pareció clave para explicar todo el proceso de las dictaduras: quién las puso, quién las apoyaba. Me enfoqué en el ‘Plan Cóndor’, pero no exclusivamente. En mi ensayo fotográfico hay muchos retratados que no son víctimas del plan en sí, pero sus experiencias ayudan a entender lo que llevó a esa operación”.

La exposición reunió más de 100 fotografías en blanco y negro, organizadas en series temáticas por el curador brasileño Diógenes Moura.

Por casi una década, Pina viajó por Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay tras las huellas del horror vivido, recolectando imágenes captadas por fotógrafxs locales y/o pertenecientes a archivos públicos o privados, tejiendo así, aunque de modo parcial, un relato que fue silenciado durante mucho tiempo.

Compartimos aquí una selección de aquellas imágenes que dan cuenta de la enorme importancia testimonial de su trabajo.

MEMORIAS CLANDESTINAS

Conversatorio con miembrxs del Archivo de la Memoria Trans

En el marco del Día Internacional de la Memoria Trans, desde el Parque de la Memoria-Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado y la Dirección General de Convivencia en la Diversidad del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires les acercamos “Memorias clandestinas. Conversatorio con miembrxs del Archivo de la Memoria Trans”, una entrevista conmovedora que recoge testimonios fundamentales sobre la memoria del colectivo trans en Argentina.

Los emotivos relatos de María Belén Correa, Sandra Esther Castillo, Katiana Villagra y Bibiana Blason permiten dimensionar la enorme deuda que como sociedad aún tenemos, no sólo hacia la memoria sino también hacia el presente y el futuro de la comunidad trans en nuestro país. Desde el exilio y la persecución, hasta la violencia de Estado y la indiferencia social, la “familia trans” ha experimentado, quizás más que cualquier otra minoría, que lo personal siempre es político.

El conversatorio se completa con el valioso material audiovisual que ellxs han recogido y clasificado y que, actualmente, conforma el AMT (Archivo de la Memoria Trans).

Acercamos al público estos materiales con el compromiso de transmitir la memoria del colectivo trans y con la esperanza de visibilizar y concientizar sobre su lucha y su resistencia para así ampliar la perspectiva de los derechos humanos. 

Teatroxlaidentidad itinerante

Teatroxlaidentidad es un movimiento teatral de actores, dramaturgxs, directores, coreógrafxs, técnicxs y productores que se inscribe dentro del marco del teatro político, y es uno de los brazos artísticos de Abuelas de Plaza de Mayo. Un movimiento cuyo objetivo es hacer propia la búsqueda de Abuelas, quienes desde hace más de cuatro décadas siguen el rastro de muchísimxs jóvenes que aún no conocen su verdadera identidad. 

En este contexto de pandemia Teatroxlaidentidad sigue itinerando de manera virtual. Desde el Parque de la Memoria compartimos con ustedes las obras “La búsqueda” y “Record Guinness”, en el marco del mes de la Identidad.

Video sobre la exposición Identidad

Compartimos en esta oportunidad un video especialmente realizado para la exposición Identidad proyectada para inaugurar en marzo de este año y postergada por la pandemia de COVID-19. 

Hacia fines de 1998, cuando se encontraban vigentes las leyes de impunidad que impedían el juzgamiento de los autores de crímenes de lesa humanidad durante la última dictadura cívico-militar, las autoridades del Centro Cultural Recoleta tomaron una significativa decisión en el marco de su política institucional: otorgar visibilidad pública a la problemática de la apropiación ilegal de niños durante la dictadura. La propuesta fue elevada a Abuelas de Plaza de Mayo, que aceptó y colaboró aportando la información fundamental que el organismo venía recabando desde 1977. Así, una vez acordada la colaboración entre ambas instituciones, el equipo de trabajo se completó con un grupo de artistas visuales, quienes aportaron su mirada poética y su compromiso con la causa. 

La exposición se tituló Identidad y se llevó a cabo en las salas principales del Centro Cultural Recoleta entre noviembre 1998 y enero de 1999. Su objetivo fue poner el foco sobre la búsqueda de lxs nietxs que Abuelas de Plaza de Mayo venía realizando desde octubre de 1977. La estrategia visual de colocar un espejo entre las fotografías de hombres y mujeres –padres y madres– detenidos-desaparecidos y/o asesinados buscaba rescatar algún parecido físico entre ellxs y sus hijxs apropiadxs ilegalmente, jóvenes que hacia fines de los 90, tenían entre 19 y 25 años, la misma edad que sus padres al desaparecer. Así la semejanza física podría, quizás, traducirse en parentesco y esxs jóvenes recuperarían su historia familiar. En una primera instancia, los espejos invocaban el llamado de la sangre. Pero también funcionaban en sentido metafórico: todx aquel que se reflejara en ellos se involucraba en la trama de horror de la desaparición y la apropiación, reforzando así la idea de trauma colectivo que la apropiación ilegal ocasionó en toda la sociedad. 

En este video se reconstruye la historia de la primera exposición Identidad a través de imágenes de archivo y de los testimonios de lxs que la llevaron a cabo, quienes a su vez, reflexionan sobre la importancia de reeditarla en la actualidad en el Parque de la Memoria. 

Hoy el objetivo sigue siendo el mismo: localizar a lxs que faltan, recomponer las historias que aún se encuentran truncas, restituir la identidad de cada unx de ellxs otorgándoles el derecho a conocer quiénes fueron sus padres, y por ende, de dónde provienen, no sólo ellxs mismxs sino también sus hijxs. Porque si en 1998, cuando esta exposición se llevó a cabo por primera vez, lxs nietxs buscadxs tenían entre 19 y 25 años, hoy tienen entre 41 y 47, y son también sus hijxs quienes tienen derecho a conocer la verdad. Aún hay cientos de hombres y mujeres que no saben que son hijxs de desaparecidos. Sus hijxs –bisnietxs de las Abuelas– tampoco conocen su verdadera identidad. 

Octubre: Mes de la Identidad

Abuelas de Plaza de Mayo

El 22 de octubre es el Día Nacional del Derecho a la Identidad, que conmemora la lucha de las Abuelas de Plaza de Mayo en su tarea de recuperación de los niñxs apropiadxs por la última dictadura cívico – militar. Por este motivo durante el mes de Octubre estaremos compartiendo contenidos sobre esta temática.

En este caso compartimos parte de los materiales de la exposición Identidad proyectada para inaugurar en marzo de este año y suspendida por la pandemia de COVID-19. 

La exhibición Identidad es una versión actualizada de una primera muestra llevada a cabo en 1998 en el Centro Cultural Recoleta. A veintidós años de realizada aquella exposición, el Parque de la Memoria decide reeditarla, valiéndose de la información con la que Abuelas de Plaza de Mayo cuenta en relación a los nietos que fueron apropiados.  A la fecha son ciento treinta los casos resueltos, de los aproximadamente quinientos que las Abuelas estiman en total; ciento treinta personas que recuperaron su verdadera identidad gracias a la fuerza del amor y la lucha inexorable de estas mujeres que son un emblema en todo el mundo, pero también, gracias a la reapertura de los juicios por crímenes de lesa humanidad y a la implementación de políticas de Estado vinculadas a los derechos humanos.

Hoy el objetivo sigue siendo el mismo: localizar a los que faltan, recomponer las historias que aún se encuentran truncas, restituir la identidad de cada uno de ellos otorgándoles el derecho a conocer quiénes fueron sus padres, y por ende, de dónde provienen, no sólo ellos mismos sino también sus hijos. Porque si en 1998, cuando esta exposición se llevó a cabo por primera vez, los nietos buscados tenían entre 19 y 25 años, hoy tienen entre 41 y 47, y son también sus hijos quienes tienen derecho a conocer la verdad. Aún hay cientos de hombres y mujeres que no saben que son hijos de desaparecidos. Sus hijos –bisnietos de las Abuelas– tampoco conocen su verdadera identidad. 

Construcción y armado del Museo Aerosolar

Un proyecto de Tomás Saraceno.

Desde el proyecto curatorial del Parque de la Memoria intentamos que cada exposición colabore, a su manera, a poner en crisis la memoria “hábito”, esa memoria rutinaria que tiende a asentarse en lugares comunes y en conclusiones fáciles y tranquilizadoras. En cambio, nos interesa problematizar desde lo poético, alumbrando aspectos poco frecuentes en relación con nuestro pasado reciente, teniendo en cuenta la enorme potencia reflexiva de la imaginación, la ficción y la metáfora.

En esta oportunidad, compartimos el registro audiovisual del Museo Aerosolar del arquitecto y artista Tomás Saraceno en el marco de la muestra grupal curada por Inés Katzenstein y Javier Villa. Desde su curioso y bello título Aquella mañana fue como si recuperara si no la felicidad, sí la energía, una energía que se parecía mucho al humor, un humor que se parecía mucho a la memoria la exposición intentó testear nuevos modos de abordar la historia y la memoria de nuestro pasado reciente. Inspirada en una frase extraída del cuento “Sensini”, de Roberto Bolaño, la exhibición proponía explorar un vínculo con la memoria que no esté desconectado de una sensación de energía o, incluso, postular un vitalismo apoyado en una relación permanente con lo que ya no está. La muestra contó con la participación de Carlos Huffmann, Irina Kirchuk, Martín Legón, Lux Lindner, Luis Garay, Eduardo Navarro, Belén Romero Gunset, Axel Straschnoy, Marcela Sinclair, Cecilia Szalkowicz, Gastón Pérsico, Santiago Villanueva, Osías Yanov y Tomás Saraceno, todxs ellxs, artistas nacidxs durante los años 70 y 80 y cuyas obras se alejan de los discursos estéticos dominantes sobre el terrorismo de Estado.

El Museo Aerosolar es un proyecto comunitario y colaborativo iniciado por Saraceno. Se trata de un globo construido con bolsas de plástico reutilizables que va tomando forma de acuerdo a las colaboraciones que recibe en cada ciudad donde se aloja. Ante los desafíos que plantean los desplazamientos, las migraciones y la acuciante situación medioambiental, Saraceno desarrolla el concepto de ciudades-aeropuerto, células habitables que se comportarían como nubes, proponiendo así un urbanismo lúdico y utópico, donde las personas se apropian creativamente de las soluciones de vivienda.

PERFORMANCE

Fisicología

Luis Garay

Desde el proyecto curatorial del Parque de la Memoria intentamos que cada exposición colabore, a su manera, a poner en crisis la memoria “hábito”, esa memoria rutinaria que tiende a asentarse en lugares comunes y en conclusiones fáciles y tranquilizadoras. En cambio, nos interesa problematizar desde lo poético, alumbrando aspectos poco frecuentes en relación con nuestro pasado reciente, teniendo en cuenta la enorme potencia reflexiva de la imaginación, la ficción y la metáfora.

En esta oportunidad, compartimos el registro audiovisual de las acciones realizadas por Luis Garay en el marco de la muestra grupal curada por Inés Katzenstein y Javier Villa. Desde su curioso y bello título –Aquella mañana fue como si recuperara si no la felicidad, sí la energía, una energía que se parecía mucho al humor, un humor que se parecía mucho a la memoria⎼ la exposición intentó testear nuevos modos de abordar la historia y la memoria de nuestro pasado reciente. Inspirada en una frase extraída del cuento “Sensini”, de Roberto Bolaño, la exhibición proponía explorar un vínculo con la memoria que no estuviera desconectado de una sensación de energía o, incluso, postular un vitalismo apoyado en una relación permanente con lo que ya no está.

Además de Luis Garay, la muestra contó con la participación de Carlos Huffmann, Irina Kirchuk, Martín Legón, Lux Lindner, Eduardo Navarro, Belén Romero Gunset, Axel Straschnoy, Marcela Sinclair, Cecilia Szalkowicz y Gastón Pérsico, Santiago Villanueva y Osías Yanov, todxs ellxs, artistas nacidos durante los años 70 y 80 cuyas obras escapan tanto del expresionismo como del conceptualismo de corte político que han dominado los discursos estéticos sobre el terrorismo  de Estado.

Public Voices!

Rastros de manifestaciones feministas en 8 países

¿Cuáles son los rastros sonoros y visuales de las manifestaciones feministas? Partiendo de este interrogante damos a conocer de manera exclusiva desde el Parque de la Memoria la primera obra audiovisual de Public Voices!

En los últimos años, el aumento de demandas y reclamos en torno a cuestiones de género tuvo un gran impacto en la agenda pública internacional. En este contexto surge Public Voices!, un proyecto colectivo entre artistas sonoras, visuales y diseñadoras activistas de Argentina, Chile, Uruguay, Paraguay, Perú, Colombia, México y Suiza.

El colectivo se propone pensar nuevos modos de habitar el espacio público a partir del registro sonoro de las marchas feministas. Su objetivo es establecer una plataforma de intercambio entre voces de países diversos, como pueden ser Suiza y Argentina, a través de experiencias en el espacio público, entendiéndolo como un significante flexible y contingente, un territorio en disputa que debe delimitarse permanentemente. Estos cantos, gritos y susurros conforman no solamente un patrimonio cultural intangible, sino que también son dispositivos que producen comunidad y encuentro colectivo que atraviesa los bordes de las fronteras nacionales y construye sentidos compartidos.

A partir de estas premisas surgen algunos interrogantes: ¿Cuáles son las formas de estilización del cuerpo, las prácticas, las visiones, los recursos sociales y materiales que cuentan como indicadores de quién estaría dentro y fuera de los marcos regulatorios del espacio público? ¿Qué se siente al tomar el espacio público?

¿Qué cambia el poder hablar? ¿Qué significa encarnar y compartir esos momentos de manifestación?¿Cómo podemos documentar estos momentos? ¿Podemos aprender unxs de otrxs? ¿Quién se siente dentro de este movimiento?

“Estamos convencidas de que el movimiento feminista no tiene barreras, pero no olvidamos las particularidades y desigualdades que existen entre las regiones. América Latina está compuesta por muchas regiones con culturas y tradiciones diversas y en Suiza los diferentes cantones y movimientos migratorios también plantean escenarios de diversidad y desigualdad. Sin embargo, somos muy conscientes de que estamos hablando de realidades completamente diferentes en términos socioeconómicos y nos interesa ver de qué modo eso se manifiesta en las apropiaciones del espacio público. Es por ello que nos proponemos intercambiar experiencias, conocimientos relacionados con prácticas artísticas y activistas relacionadas con el espacio público y la documentación.”

CONFERENCIA

Exhibiendo la ausencia y la pérdida: 10 principios curatoriales

Joanne Rosenthal

El 23 de noviembre de 2019, la curadora británica Joanne Rosenthal brindó en el Parque de la Memoria un taller teórico-práctico titulado “Exhibiendo la ausencia y la pérdida: objetos, narrativas y trauma”.

El taller, enmarcado en el proyecto Staging Difficult Pasts, un programa de investigación transnacional con sede en la Universidad de Londres, buscó examinar qué nuevos diálogos es posible establecer entre el teatro contemporáneo, la curaduría y los sitios de memoria en Argentina, Polonia, Lituania, España; países que comparten experiencias disímiles de “pasados difíciles”.

En esta oportunidad, compartimos con ustedes el registro de la presentación de Rosenthal en la que, a partir del análisis de diez casos, expone algunas estrategias y recursos utilizados por diversas instituciones alrededor del mundo para poner en escena formas diferentes de la ausencia y la pérdida.

Registro de la acción Invasión, 2001

GAC (Grupo de Arte Callejero)

Continuamos compartiendo materiales de exposiciones pasadas, en este caso lxs invitamos a ver el registro de la acción Invasión del Grupo de Arte Callejero – GAC, integrado por Lorena Bossi, Vanesa Bossi, Fernanda Carrizo, Mariana Corral y Carolina Golder.

En noviembre de 2017 el Parque de la Memoria presentó Liquidación por cierre, una exposición que dio cuenta de los veinte años de trabajo del GAC y sus prácticas artístico-políticas. Las acciones del GAC tuvieron siempre como escenario a la calle y estuvieron motivadas por la necesidad de apoyar y/o visibilizar la lucha de alguna minoría frente al abuso de poder o la violencia política. Así, su primera intervención fue en apoyo a la lucha de los docentes que ayunaban en la Carpa Blanca en 1997. 

En los años subsiguientes el GAC abordó la problemática del terrorismo de Estado, realizando junto a la agrupación H.I.J.O.S. los escraches a genocidas para visibilizar el clima de impunidad provocado por los indultos hacia fines de los años noventa. 

Para la exposición Liquidación por cierre se construyó en la Sala PAyS una gran instalación con andamios callejeros que ofició de soporte para los registros de las acciones realizadas por el grupo: afiches, imágenes, videos, fotografías, y su icónica señalética, también presente en el Parque, en la intervención urbana Carteles de la memoria, con la que el grupo ganó el Concurso Internacional de Esculturas en 1999.

Invasión se llevó a cabo en diciembre de 2001, y tuvo como objetivo denunciar la crisis política y económica que se vivía por entonces. Constó de dos etapas, en la primera se intervinieron afiches publicitarios de empresas, multinacionales y bancos del microcentro porteño con calcomanías producidas por el grupo que homologaban el código militar al empresarial. Se utilizaron tres íconos militares: tanque, misil y soldado, acompañados por una tabla de referencias donde se los comparaba con elementos del sistema empresarial vigente en ese momento. El tanque fue homologado a las multinacionales, el misil a los medios masivos, y el soldado al sistema de seguridad. La segunda etapa consistió en el lanzamiento, desde lo alto de un edificio céntrico, de diez mil soldaditos de juguete en paracaídas, el 19 de diciembre de 2001, horas antes del estallido de la crisis.

El registro muestra la lluvia de soldaditos cayendo hacia la calle. La gente, sin saber qué ocurre, se detiene a mirar el cielo y trata de agarrar alguno. La escena transcurrió a las cinco de la tarde del 19 de diciembre. Poco después, se declaró el estado de sitio, se produjo la huida del presidente, el corralito, el saqueo de los bancos a los ahorristas y las muertes injustas por la represión, todos eventos que oficiaron de disparadores de las futuras acciones del GAC.

Ésta, como muchas de las acciones del grupo, contó con la ayuda de compañerxs y organizaciones que, como ellas, conciben su trabajo como un proceso colaborativo.

“Como colectivo, nos reconocemos como parte de una genealogía de prácticas artístico-políticas que tuvieron lugar en varios países de Latinoamérica en el marco de la lucha contra el imperialismo y las dictaduras en los ‘60, ‘70 y ‘80; pero también, como parte de un movimiento que llega hasta el presente y se proyecta en las futuras resistencias.”

Bestiario de India's

Adriana Bustos

Entre las numerosas crónicas que se escribieron durante el siglo XVI con objeto de acercarse al “Nuevo Mundo”, el proyecto de Adriana Bustos añade una retórica particular. En sus obras, la artista viaja de acá para allá, yendo y viniendo, como una cronista, pero elude la orientación antropológica de la mirada. O más bien, habilita una visión más torpe, especulativa o imperfecta si se quiere, que actúa de manera simultánea. Lo importante para su práctica es expandir la concepción que la historia moderna asignó al saber científico. No para clausurar aquella metodología, sino para crear imágenes que amplíen el universo que configura el texto escrito y propongan narrativas transversales.

Bestiario de India’s es, formalmente, un planisferio: una serie de dibujos que fueron realizados por los cronistas del siglo XVI al llegar a América y que Bustos reconstruye generando un gran ecosistema de seres fantásticos y animales monstruosos. Este montaje es un recurso que actúa como mapa . Un gran atlas que integra tiempos y espacios dispares donde la artista agrega conceptos, imágenes y relatos que no se corresponden con el ciclo lineal que la Historia describe, sino que instaura una nueva genealogía de los hechos.            

Bustos excava en la concepción histórica de la cultura que cristaliza como verdad o certeza ciertos acontecimientos del pasado. Los discursos totalizadores son atravesados por nuevas miradas que perforan aquel andamiaje: echar un vistazo a lo que a simple vista no aparece —o cuyo origen es impreciso—, considerar tiempos incongruentes y espacios distantes, hacer tambalear la arquitectura compacta del relato histórico para desentrañar enigmas e imaginar nuevos horizontes de investigación. En la obra de Bustos la imaginación se presenta como uno de los seis sentidos.

Las imágenes con figuras que transgreden los órdenes de lo natural se enhebran en un mundo alucinatorio de sueños. Esa mirada exuberante, inscrita en los bestiarios medievales, permitió ampliar el catálogo de bestias a partir de las crónicas de fauna y flora en América: la crudeza de un mundo desconocido impulsado por la fascinación pero también por el espanto y el deseo moralizante. Un gran elenco de monstruos habita en espacios flotantes donde el tiempo parece frágil, especialmente cargado de misterio, como un mundo cerrado en su propia lógica. Bestiario de India’s estructura en imagen lo que la palabra manifiesta en escritos. Es un texto de carácter visual sobre cómo acceder, figurar y fantasear con lo desconocido.

Pira de los Bienes Culturales

Tótem & Tabú

Entre junio y octubre de 2019, en el marco de BIENALSUR,  el Parque de la Memoria presentó  Piras. Historias de brujas, una exposición del colectivo de artistas Tótem & Tabú, integrado por Laura Códega, Malena Pizani y Hernán Soriano. Partiendo de la figura de la bruja, la exposición se propuso echar luz sobre aquellos conocimientos, prácticas e ideologías implementados por mujeres y que fueron censurados por la historia oficial, invitando a pensar de qué modo esta invisibilización sobrevive aún en la actualidad.

La muestra se organizó a partir de un conjunto de siete “piras” que incluían obras de diversos formatos. En esta oportunidad compartimos la Pira de los bienes culturales, en la que, a partir de un collage audiovisual, se percibe el modo en que la cultura de los medios masivos ha colaborado en la difusión del estereotipo de la bruja. Así, a través de diferentes fragmentos de películas, series populares, videoclips, y videos caseros vemos un desfile del imaginario clásico de la hechicera: mujeres con poderes sobrenaturales, pervertidas, sanguinarias o malvadas, en definitiva, mujeres que representan el reverso de la mujer sumisa y maternal postulada por el discurso patriarcal.

Como señala la Dra. en Estudios de Género Malena Nijensohn —invitada especialmente a  escribir un ensayo para esta muestra— “no hay un único relato sobre las brujas y acaso allí resida también algo de su potencia política, en esa insistencia de las figuraciones que pide nuevas escrituras y re-escrituras”. Finalmente, “lo que enlaza a todas estas brujas es que, de una manera u otra, están en los márgenes de los roles esperables y desde allí desafían algún aspecto del orden instituido”.

Tótem & Tabú es un grupo conformado por Laura Códega, Malena Pizani y Hernán Soriano que trabaja desde el 2014 realizando investigaciones y obras sobre temas vinculados al origen de ciertas prohibiciones. Su interés se centra en analizar las estructuras de poder, así como aquello que está prohibido o es señalado como tabú o herejía.

Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política.

Alicia Herrero

¿Qué papel juega la economía política en nuestras vidas? Partiendo de este interrogante, Alicia Herrero presentó una exposición en el Espacio Base de Datos del Parque de la Memoria, entre marzo y mayo de 2019. Bajo el título Ensayos sobre un tribunal. Al poder de la economía política la muestra tomó como punto de partida la estructura performativa de un juicio, buscando construir nuevas formas de visualidad y de percepción sobre el accionar del sistema económico conocido como “capitalismo neoliberal” y su dramática gravitación sobre nuestras condiciones de existencia.

Así, empujando los límites de lo que puede o no ser representado jurídicamente, la sala de exposiciones se transformó en un “tribunal” que recibió testimonios y acusaciones durante el transcurso de la muestra.

“El Capital es una cultura que aparece como naturaleza y su ley se nos antoja tan fatal como la ley de gravedad” advierte Eduardo Grüner desde el lúcido prólogo que acompañó la exposición. ¿Será posible cuestionar la ley del Capital para ponerla al servicio de la gente? Ensayos sobre un tribunal se propone desnaturalizar el modo en que se construye valor en el marco del actual sistema económico, como sabemos, a través de la generación de desigualdad. 

En esta oportunidad presentamos tres videos, dos de los cuales formaron parte de la muestra y un tercero que es un registro de la Audiencia pública en clave performática realizada durante la exposición, en la que se contó con invitadxs especiales convocadxs por la artista para dar testimonio.

Reunión: ediciones urgentes

Dani Zelko

El artista, poeta y editor argentino Dani Zelko despliega su procedimiento de escritura a través de un encuentro: transita por ciudades, pueblos y comunidades. Conoce personas. Le hablan y él escribe a mano todo lo que dicen. No existen preguntas ni tema específico y la transcripción es instantánea. La respiración es la pausa que opera como paso a la siguiente línea y da lugar a la escritura en verso. La pausa es el enter, ese instante donde aparece el poema.

Los poemas se transcriben a la computadora y al día siguiente se imprime el libro en la mochila-imprenta que lleva consigo. Cada participante lee en voz alta sus poemas en una ronda de nueve sillas. Los libros son regalados y a su vez distribuidos en otros lugares, donde la acción de disponer las nueve sillas es replicada, dando voz a esos textos por otros portavoces.

“Ediciones Urgentes” son las cinco publicaciones que aquí se presentan. Esta urgencia radica en la condición adversa en la que fueron concebidas. La imprenta nómade acerca y distribuye gratuitamente los libros entre las comunidades. Actúa como medio para ofrendar de mano en mano una práctica surgida de la cercanía. Una reivindicación a la presencia y al estar con otrxs.

Museo del Neo-Extractivismo (MNE)

colectivo Etcétera

Continuamos compartiendo material de El futuro de la memoria, un proyecto concebido por el Goethe-Institut a través de sus sedes en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Uruguay, con el fin de alentar el diálogo regional entre sitios de memoria y la reflexión sobre el abordaje de la memoria política desde una perspectiva artística. En el año 2018 el Parque de la Memoria fue sede del capítulo argentino del proyecto y participó de su desarrollo conceptual conjuntamente con el Museo Sitio de la Memoria ESMA.

En este caso lxs invitamos a realizar una visita virtual por el Museo del Neo-Extractivismo (MNE), del colectivo Etcétera, integrado por Loreto Garín Guzmán y Federico Zukerfeld.

El MNE es un proyecto nómade que adopta diversos formatos expositivos según el espacio, institución y contexto al que se desplaza. Surgió a partir de una investigación acerca del modelo neoextractivista y sus consecuencias para el medio ambiente, la salud social y los derechos humanos.

El montaje en la sala PAyS del Parque de la Memoria se basó en el prototipo de una de sus posibles salas e incluyó instalaciones, obras de sitio específico, fotografías, videos, objetos y mapas, entre otros materiales. Asimismo, el MNE presentó algunas perfomances e intervenciones en los alrededores del Parque de la Memoria.

Durante la exposición, el colectivo Etcétera realizó este registro en 360 grados, donde podemos ver un recorrido por el MNE.

Habeas Sonus

Mariano Speratti

Continuamos compartiendo algunas obras de El futuro de la memoria, un proyecto concebido por el Goethe-Institut a través de sus sedes en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Uruguay, con el fin de alentar el diálogo regional entre sitios de memoria y la reflexión sobre el abordaje de la memoria política desde una perspectiva artística. En el año 2018 el Parque de la Memoria fue sede del capítulo argentino del proyecto y participó de su desarrollo conceptual conjuntamente con el Museo Sitio de la Memoria ESMA.

En esta oportunidad, presentamos Habeas Sonus, de Mariano Speratti, obra que indaga sobre las posibilidades de restituir la memoria a partir del sonido. Speratti nos sitúa en el año 2076 e imagina un futuro en el que ya no hay adultos y son lxs niñxs quienes administran la memoria y develan archivos sonoros del pasado. En clave de ciencia ficción, accedemos a fragmentos sonoros de spots publicitarios producidos por agencias para la Junta Militar del 76.

Junto a este video, el artista presenta cuatro archivos sonoros que integran la sección  “Rescates de la Oficina de la Memoria”. Estos “rescates” son testimonios orales de personas que vivieron su niñez, adolescencia o juventud durante la última dictadura cívico-militar en la  Argentina, y traen a la memoria recuerdos de esa época a partir de una pregunta: ¿qué elementos sonoros mandarías al futuro para reconstruir lo que se vivió en aquellos años?

Así, la obra de Mariano Speratti propone abordar el sonido como un testimonio ineludible, conectando con la sensibilidad de la memoria auditiva y los universos sonoros que dejan marcas en el tiempo, tanto en la historia personal como en la colectiva.

Charla en vivo: Arte y activismo en tiempos de pandemia

Arturo Duclos

Marcelo Brodsky

Cartas

Gabriela Golder

El futuro de la memoria fue un proyecto concebido por el Goethe-Institut a través de sus sedes en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Uruguay, con el fin de alentar el diálogo regional entre sitios de memoria y la reflexión sobre el abordaje de la memoria política desde una perspectiva artística. Así, conjuntamente con el Museo Sitio de Memoria ESMA, el Parque de la Memoria participó de su desarrollo conceptual y fue sede del capítulo argentino del proyecto, que incluyó obras de Gabriela Golder, Marcelo Brodsky, Mariano Speratti y el Colectivo Etcétera. Además de las obras realizadas especialmente para la muestra, una pieza fundamental de este proyecto fue el ensayo escrito por Christian Ferrer que reflexiona con lucidez extrema acerca de los mecanismos de preservación y borramiento de la memoria a lo largo de la historia.

En esta ocasión compartimos Cartas, un video de Gabriela Golder en el que un grupo de niñxs entre 8 y 12 años lee diversas cartas escritas desde el encierro de una cárcel, la clandestinidad o el exilio. Son cartas que pertenecen a la colección Cartas de la dictadura de la Biblioteca Nacional. Así, madres y padres consultan desde la ausencia, acerca de la escolaridad, la alimentación de sus hijxs o las tareas del hogar, en un intento por hacerse presentes en su cotidianeidad. Pero sin duda la potencia poética del video de Golder se encuentra en lo no dicho, en el silencio protector que guardan esas cartas, en el denodado intento por no transmitir el dolor y la angustia de la incertidumbre.

Enrique Ježik

Círculos concéntricos, 2014

Dispersas las fuerzas se debilitan, 2019

Continuamos compartiendo algunos materiales que formaron parte de la exposición Lucha de calles. Imágenes y relatos a 50 años del Cordobazo, llevada a cabo entre marzo y junio de 2019 en conmemoración de una de las revueltas populares más importantes de nuestra historia. En este caso, la instalación Dispersas las fuerzas se debilitan (2019) de Enrique Ježik parte de una cita tomada de una arenga por el voto femenino pronunciada en 1920 por la socialista argentina Alicia Moreau de Justo. Si bien la frase no alude directamente al Cordobazo, inscripta en el ámbito de esta muestra, recupera y resignifica sentidos por fuera de su contexto original. 

Además, compartimos Círculos concéntricos (2014), una performance de Ježik que no formó parte de la exposición pero que resume varias de las preocupaciones que atraviesan su cuerpo de obra: la disputa de territorios de poder, la violencia ejercida y resistida, el empleo y la visibilidad de la fuerza y su instrumental como signos y factores de la historia contemporánea. 

Tracción a sangre

Hugo Aveta

Tracción a sangre de Hugo Aveta formó parte de Lucha de Calles. Imágenes y relatos a 50 años del Cordobazo, la exposición que el Parque de la Memoria presentó entre marzo y junio de 2019, en el marco del aniversario del Cordobazo, una de las revueltas populares más reivindicadas de nuestra historia.

La muestra problematizó este hecho histórico a través de las potencialidades semánticas que brindan los materiales de archivo y las posibilidades poéticas que habilita el arte contemporáneo. Así, la obra de Aveta, junto con la de otros artistas, fue puesta en diálogo con diversos materiales documentales.

Si bien esta obra no refiere específicamente al Cordobazo, lo evoca de manera poética y melancólica. Su video, que pareciera ser una película muda, está construido por fotografías fijas, que él transforma en imágenes en movimiento. A través de ellas puede verse una suerte de manifestación o revuelta atemporal, cuerpos que se unen y se separan, aparecen y desaparecen, conformando por momentos una especie de danza. Las imágenes presentan una textura singular, apenas se reconocen trazos de grafito sobre lienzo.

Puesta a dialogar con las imágenes de archivo, la obra de Aveta aportó una mirada singular y descentrada sobre el Cordobazo. Frente a las imágenes de violentas barricadas y autos quemados, la historia política construyó una épica casi mítica en torno a la singular confluencia de la organización obrera y estudiantil. Por su parte, la obra de Aveta, oscila en esta dialéctica que se mueve entre lo violento y lo heroico.

Ante la ley

RES

Hacia fines de 2012, en el marco de su exposición individual Dunamis. Entre el desastre y la esperanza, RES reunió a un grupo de personas con el propósito de quemar un auto y registrar la acción. Luego de una breve clase en la que aprendieron a fabricar y manipular una molotov, el grupo prendió fuego un Citroen 3CV, similar a los que fueron quemados durante la insurrección popular conocida como el Cordobazo (1969). 

RES, quien tenía doce años cuando se desató la revuelta, emprende con esta acción un ejercicio de memoria colectivo que rescata interrogantes del pasado pero conociendo de antemano la imposibilidad de brindar respuestas categóricas. Ante la ley es el video que registró aquella acción que intentó reflexionar sobre los cruces y los pliegues entre historia, memoria, arte y violencia.

Reflexiones en torno al arte y la política

Universidad Nacional de Tres de Febrero

A partir de la invitación que los curadores brasileños Moacir dos Anjos y Agnaldo Farías le hicieron al Parque de la Memoria para que participara de la 29° Bienal de San Pablo en 2010, un grupo de artistas argentinos se reunió para reflexionar acerca de las vínculos, explícitos o implícitos, que articulan al arte y la política.
 
Así, León Ferrari, Cristina Piffer, Hugo Vidal, Rosana Fuertes, Daniel Ontiveros, Marcelo Brodsky, y las integrantes del Grupo de Arte Callejero, Carolina Golder, Mariana Corral y Lorena Bossi, vuelven sobre sus propias prácticas artísticas para repensar si resulta posible separar el arte de la política. 
 
El registro fue realizado por el Centro de Producción Audiovisual de UNTREF (Universidad Nacional de Tres de Febrero).

Caetano Veloso en el Parque de la Memoria

El 10 de diciembre de 2011, Caetano Veloso fue invitado especialmente por el Parque de la Memoria para una entrevista pública en el marco del Día Internacional de los Derechos Humanos. Asimismo Caetano recorrió el Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado y recordó especialmente all músico brasilero Francisco Tenorio Cerqueira Junior, desaparecido en Argentina el 18 de marzo de 1976.

Durante la entrevista, Caetano reflexionó acerca de su historia personal, su exilio político, los inicios del Tropicalismo, y su obra en relación con la política y la memoria en América Latina.

Este documental relata su recorrido por el Parque de la Memoria, su encuentro con los organismos con las Madres y Abuelas de Plaza de Mayo y con algunos músicos argentinos que se acercaron a saludarlo. 

En la sangre: Sueños de agua y desembarco

Un espectáculo de Virginia Innocenti

A través de una propuesta musical, enriquecida por las dotes actorales de la intérprete, En la sangre: Sueños de agua y desembarco aborda la temática de la inmigración, el destierro y la construcción de la identidad a partir de la memoria de las colectividades que desembarcaron en América.

Virginia Innocenti ideó este espectáculo para ser presentado especialmente en el Parque de la Memoria tomando como punto de partida la historia de su bisabuela, también llamada Virginia, que allá por 1900 cruzó el Atlántico por amor.

Bajo la dirección musical de Diego Vila, Virginia recorre un repertorio de tangos, zambas, óperas y canciones populares que, intercaladas con anécdotas, documentos, valijas y pasaportes, se convierte en un canto a la memoria de quienes tuvieron una historia común de desarraigo y en una voz de esperanza para aquellos que han tenido que recomenzar su vida en un nuevo lugar.

Recorrido por la exposición ''Mapa de sueños latinoamericanos''
de Martín Weber

El Parque de la Memoria te invita a recorrer Mapa de sueños latinoamericanos, de Martín Weber, que tuvo lugar entre noviembre de 2019 y febrero de 2020 en la Sala PAyS.

A partir de una consigna simple pero de largo aliento, viajar entre 1992 y 2013 por más de 53 ciudades y pueblos a lo largo de América Latina solicitándole a distintas personas que escribieran un sueño o deseo en una pequeña pizarra y se dejaran fotografiar, el ensayo de Weber pone de manifiesto que lo personal siempre es político y que la presencia ⎼o la ausencia⎼ de políticas públicas abre ⎼o cierra⎼ los horizontes de posibilidad de las personas, su capacidad de soñar, de proyectar, de planear un futuro propio pero también compartido.

La exposición reunió un total de 110 fotografías en blanco y negro de escenas cuidadosamente compuestas en las que, además de la articulación de lo político con lo personal, campeaban citas y homenajes a la historia del arte, a maestros de la fotografía como el peruano Martín Chambi pero también guiños formales y compositivos a colegas contemporáneos.

Relatos de un proyecto para no olvidar

Lita Boitano
Carmen Aguiar de Lapacó

El 30 de abril se cumplen 43 años de la primera marcha de las Madres de Plaza de Mayo, realizada en plena dictadura cívico militar para conocer el destino de sus hijas e hijos secuestrados y/o asesinados por el terrorismo de Estado.

Para conmemorar este aniversario, compartimos fragmentos de las entrevistas realizadas a Lita Boitano y Carmen Aguiar de Lapacó, madres de desaparecidos e integrantes de organismos de Derechos Humanos miembros del Consejo de Gestión del Parque de la Memoria.

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Ciclo de entrevistas realizado por el equipo de investigación y Monumento del Parque de la Memoria.

Lxs entrevistadxs narran sus vivencias y experiencias en relación al proceso de creación de este espacio de memoria. Son ellxs quienes cuentan desde su rol de luchadorxs inclaudicables en la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia, cuál es el sentido de este lugar.

''Punto impropio''
de Albertina Carri

Operación fracaso y el sonido recobrado fue el título que Albertina Carri le dio a la exposición que realizó en el Parque de la Memoria entre septiembre y noviembre de 2015. La muestra presentó una serie de video-instalaciones que ponían en escena una memoria personal, familiar y política. Así la exposición podía leerse como una suerte de autorretrato conformado por restos y vestigios del pasado: correspondencia epistolar, fragmentos fílmicos, guiones, documentos y registros son para Carri el sustento de una política de archivos que trasciende lo biográfico para ofrecer una lectura posible de nuestra historia reciente.

Durante el año que mis padres estuvieron secuestrados, mi madre escribía cartas a mis hermanas y a mí dándonos consejos de todo tipo. A mis tías pidiéndoles que se hagan cargo de nosotras, a mis abuelos solicitándoles ayuda para que nos críen. Escribía cartas con formato de legado, escribía cartas en lenguaje cotidiano. Escribía para acortar una distancia que ella sabía, sería irreparable. Mamá era profesora de literatura y en esas cartas una de sus preocupaciones era cómo nos formaríamos en esa materia cuando ella no estuviera: en cada una de esas cartas hay un libro a leer. Esas cartas son el libro que Ana María Caruso no pudo escribir. Porque fue madre muy joven, porque era la mujer de un prometedor intelectual, porque la asesinaron con apenas 36 años. Punto impropio recorre la no-obra de mi madre y el dominio que el tratado que Ana María escribió en formato epistolar –ese no-libro– tiene sobre mi voz.

''Tiren Papelitos. Mundial '78: Entre la fiesta y el horror''

Tiren papelitos. Mundial 78. Entre la fiesta y el horror, exposición realizada en el Parque de la Memoria entre junio y agosto de 2018 fue una invitación a revisar críticamente la historia del Campeonato Mundial de Fútbol que tuvo lugar en nuestro país en plena dictadura cívico-militar.

A través de una esmerada investigación realizada conjuntamente con Memoria Abierta, se reunió un amplio cuerpo de imágenes, grabaciones y documentos de época, como así también obras de arte vinculadas a la temática. La propuesta apuntó a revisitar la complejidad de este evento que permitió que emergiera tanto un clima festivo como el horror más perverso.

Cuando en 1978 nuestro país fue sede del mundial, las Juntas Militares vieron la oportunidad de proyectar ante el mundo la imagen de una Argentina modelo, ordenada y pulcra. Así, los medios de comunicación lanzaron fuertes campañas vanagloriándose de la prolijidad del pueblo argentino y del régimen militar, mientras hacia adentro escalaban las persecuciones políticas y las desapariciones.

De este modo, la exposición intentó dar cuenta de las tensiones y contradicciones vividas en aquel momento: una sociedad que encontró en el mundial una excusa para volver a ocupar las calles y salir a festejar con el fútbol como respaldo, mientras en los Centros Clandestinos de Detención recrudecía la violencia.
Entre los materiales que conformaron la muestra podía verse documentación de archivo, revistas de época, afiches y memorabilia en diálogo con un conjunto de obras de artistas contemporáneos como Adriana Bustos, Mariana Telleria, Rosana Fuertes, Diana Dowek, José Luis Landet, Carlos Trilnick, Marcos López y Martín Kohan.

''Veteranos''
de Lola Arias

Veteranos formó parte de Doble de riesgo, la exposición individual de Lola Arias en el Parque de la Memoria, llevada a cabo entre agosto y noviembre de 2016. 

Fue presentada como una video-instalación en la que cinco ex combatientes reconstruyen episodios de la guerra de Malvinas en espacios que actualmente frecuentan. Hombres que durante la guerra tenían 18 años, hoy rondan los 50. Así, el pasado se actualiza en el presente cuando ellos mismos actúan la memoria de su propia experiencia. 

En el episodio que compartimos, el excombatiente Marcelo Vallejo reconstruye la muerte de su compañero de Malvinas en la pileta donde entrena para campeonatos de triatlón. Tal como señala Graciela Speranza en el catálogo de la exposición: “Veteranos nos recuerda que tras el esperado regreso a la democracia quedaron los heridos y los muertos, y también los sobrevivientes con las marcas indelebles de la experiencia en las islas”.

''Destierro''
de Anish Kapoor

El escultor indo-británico Anish Kapoor, una de las personalidades más relevantes de la escena artística contemporánea, llevó a cabo su primera exposición en la Argentina en el Parque de la Memoria-Monumento a las Víctimas del Terrorismo de Estado entre mayo y agosto de 2017.

Curada por Marcello Dantas, la muestra se tituló Destierro y proponía una lectura en clave artística de uno de los problemas más acuciantes de nuestra era: los refugiados y desplazados sin hogar y sin tierra que habitar.

Por otra parte, Kapoor expuso sus ideas y su vasta trayectoria en una entrevista pública realizada por Marcello Dantas en la Usina del Arte.

Relatos de un proyecto para no olvidar

Marie Orensanz
Claudia Fontes
Lorena Bossi (GAC)
Charo Golder (GAC)

Nora Hochbaum
Florencia Battiti

Ciclo de entrevistas realizado por el equipo de investigación y Monumento del Parque de la Memoria.

Lxs entrevistadxs narran sus vivencias y experiencias en relación al proceso de creación de este espacio de memoria. Son ellxs quienes cuentan desde su rol de luchadorxs inclaudicables en la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia, cuál es el sentido de este lugar.

En este capítulo, las artistas Marie Orensanz, Claudia Fontes, Lorena Bossi (GAC) y Charo Golder (GAC) reflexionan junto a Nora Hochbaum (Directora General PDM) y Florencia Battiti (Curadora PDM) en torno al proceso de concepción, imaginación e interpretación de sus obras emplazadas en el Parque.

''Lucha de Calles.
Imágenes y relatos a 50 años del Cordobazo.''

En el 50 aniversario de una de las revueltas populares más reivindicadas de nuestra historia (mayo 1969), esta exposición problematizó este hecho histórico a través de las potencialidades semánticas que brindan los materiales de archivo y las posibilidades poéticas que habilita el arte contemporáneo.

¿Qué queda hoy de la potencia insurrecta de aquella revuelta que reunió a obrerxs, estudiantxs y vecinxs en un mismo reclamo? ¿Qué gestos y qué formas configuraron la rebelión ante el peso agobiante de la represión y el avasallamiento de los derechos? ¿Cómo narrar ese entramado sin perder de vista el sentido que agrega el paso del tiempo?

Compartimos videos, artículos y más materiales realizados para esta exposición.

Conferencia ''Arte y Deshonra''
de Luis Camnitzer

Con la lucidez que lo caracteriza, su disertación reflexiona y resignifica las nociones de deshonra y empatía, analizando las relaciones que existen entre violencia, ética y política, no sólo en el campo de las artes visuales sino bajo las pequeñas decisiones que tomamos todos los días.

Relatos de un proyecto para no olvidar

Estela Barnes de Carlotto

Vera Jarach

Ciclo de entrevistas realizado por el equipo de investigación y Monumento del Parque de la Memoria.

Lxs entrevistadxs narran sus vivencias y experiencias en relación al proceso de creación de este espacio de memoria. Son ellxs quienes cuentan desde su rol de luchadorxs inclaudicables en la búsqueda de Memoria, Verdad y Justicia, cuál es el sentido de este lugar.

— Reunión:

ediciones urgentes

de Dani Zelko

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Presentación

El artista, poeta y editor argentino Dani Zelko introduce, de manera transversal, la atención a la voz y la experiencia sensible de quien relata y comparte. Zelko despliega su procedimiento de escritura a través de un encuentro: transita por ciudades, pueblos y comunidades. Conoce personas. Le hablan y él escribe a mano todo lo que dicen. La escritura es traducción material a través de las palabras habladas. No existen preguntas ni tema específico y la transcripción es instantánea. La respiración es la pausa que opera como paso a la siguiente línea y da lugar a la escritura en verso. La pausa es el enter, ese instante donde aparece el poema.

Los poemas se transcriben a la computadora y al día siguiente se imprime el libro en la mochila-imprenta que lleva consigo. Cada participante lee en voz alta sus poemas en una ronda de nueve sillas. Los libros son regalados y a su vez distribuidos en otros lugares, donde la acción de disponer las nueve sillas es replicada, dando voz a esos textos por otros portavoces.

La mochila-imprenta tiene una gran capacidad de hacer pública la potencia afectiva de un encuentro. Un elemento que otorga existencia y circulación a historias, relatos y memorias que atraviesan la vida de distintas personas.

Reunión es una práctica de escucha literaria. Admite la presencia de dos o más cuerpos que, en simultaneidad, conversan y encarnan un encuentro. Aquella imprenta nómade posibilita la existencia física (material) del relato oral. Así, el trabajo de Zelko va en una doble dirección: por un lado el acto de escuchar y resaltar la corporalidad de la voz, por el otro el acto de escribir para evitar su desaparición. La imprenta-mochila preserva y concede a otrxs portavoces las memorias que, con urgencia, necesitan expandirse hacia otras latitudes, otros pueblos, otras ciudades, entre otras personas que presten su cuerpo, sus ojos y su voz.

“Ediciones Urgentes” son las cinco publicaciones que aquí se presentan. Esta urgencia radica en la condición adversa en la que fueron concebidas. Situaciones de violencia, dolor, miedo y desesperación que atravesaron tanto comunidades migrantes de México, Estados Unidos y Canadá que escaparon de sus países del Sur Global buscando una nueva vida en norteamérica, como la madre de Juan Pablo Kukok, un chico de 18 años asesinado por la espalda por el policía de la Ciudad de Buenos Aires Luis Chocobar; pasando por el caso de la comunidad mapuche Lof Lafken Winkul Mapu señalada como terrorista al intentar recuperar su territorio ancestral y, por último, voluntarios en el rescate del terremoto ocurrido el 19 de septiembre de 2017 en México.

La imprenta nómade acerca y distribuye gratuitamente los libros entre las comunidades. Actúa como medio para ofrendar de mano en mano una práctica surgida de la cercanía. Una reivindicación a la presencia y al estar con otrxs.

Gonzalo Lagos

Publicaciones

01

“FRONTERA NORTE: migraciones forzadas

“Los migrantes están siendo construidos como enemigos políticos” “Los migrantes están siendo incorporados al discurso de la guerra” “Lo nuevo no son las migraciones, lo nuevo es este régimen global de fronteras, esta fantasía neoliberal de gobernar la movilidad humana” “¿Por qué no podemos entender que la inmigración es la secuela del colonialismo y la esclavitud?” “¡La migración es la disputa misma de a qué le llamamos frontera!” “¡Las caravanas migrantes son un levantamiento, una rebelión!” “¡El acto que están haciendo los migrantes termina con una era, inventa un nuevo momento histórico y político!” “Migrar es pura voluntad de vida” “Todos los seres vivos se mueven a donde hay agua, sombra, comida” “Migrar es inaugurar un nuevo relato para tu propia vida”.

Caminando por ciudades, pueblos y comunidades rurales de México, Estados Unidos y Canadá, me encontré con personas que tuvieron que escaparse de sus países del Sur Global y buscan una nueva vida en Norteamérica.

Con Roxana (Guatemala), Ahmed Moneka (Irak), Almendra Reyna (México), Njoud Aghabi (Jordania), Norma (México), Leonilla (México), Ceyla Valiente (Miccosukee), Kiki “Puntafina” (Cuba), Alfonso (Venezuela), Delbert Zepeda (El Salvador), Jessica Collins (EE.UU), Ronald Jackson (Haití), Alex Gonzalez (Guatemala), Sayak Valencia (México), Verónica Gago (Argentina), Amarela Varela (México) y Alba Delgado (Colombia).

02

“LENGUA O MUERTE: movimiento por la lengua”

Razib, Afroza y Elahi son migrantes. Nacieron en Bangladesh, viven en Madrid. El 26 de marzo, en medio de la crisis por el Covid-19, Mohamed Hossein, un paisano suyo, murió en su confinamiento después de llamar durante seis días a los sistemas de salud y emergencia. Ningún médico fue a atenderlo, ninguna ambulancia lo fue a buscar, hablaba poco español. Desde entonces, junto a otras organizaciones migrantes y sociales, están armando un movimiento por la lengua, exigiendo traducción oral obligatoria en centros de salud, escuelas, juzgados, oficinas del Estado. Interpretación ya para entender lo que les dicen, para hacerse entender, para vivir en su lengua.

Durante abril de 2020 les llamé por teléfono. Me hablaron y escuché. Hice unas pocas preguntas y sonidos para que sepan que estaba ahí. Grabé sus voces. Apenas cortamos, las hice sonar y las escribí. Cada vez que hicieron una pausa para inhalar, pasé a la línea que sigue. Borré las grabaciones, les mandé los textos y los corregimos. Armamos este libro, que tiene una versión digital de descarga gratuita y una versión en papel que distribuye la comunidad.

Con Rakibul Hasan Razib, Afroza Rhaman, Elahi Mohammad Fazle y Pepa Torres Pérez.

03

“JUAN PABLO POR IVONNE: el contra-relato de la doctrina Chocobar”

El 8 de diciembre de 2017, en el barrio de La Boca en Buenos Aires, el policía Luis Chocobar asesinó por la espalda a Juan Pablo Kukoc, un joven de 18 años que había asaltado, y supuestamente acuchillado, a un turista estadounidense. Desde el día siguiente, el Estado y los medios hegemónicos de comunicación avalaron a Chocobar como un héroe y la doctrina represiva del gobierno pasó a llamarse doctrina Chocobar.

Caminando por La Boca conocí a Ivonne, la mamá de Juan Pablo. Nos encontramos una tarde y tomamos coca con medialunas. Hicimos un libro juntxs: ella me habló y yo escribí bien rápido todo lo que me dijo. Cada vez que respiró pasé a la línea que sigue. Nada se grabó, nada se editó después. Imprimimos muchos fanzines, hicimos una ronda de sillas en la calle y lo leímos en voz alta. También hicimos una versión digital y un audiolibro. Contra el relato del poder estatal y mediático, la voz de una mujer sentada junto a su hija en la cocina de su casa de chapa.

Unas semanas después invité a investigadorxs y militantxs a tratar de rodear y desmenuzar algunas problemáticas que se desprenden del relato. Con esos textos hicimos una versión ampliada del libro. Participan Esteban Rodríguez Alzueta, Luci Cavallero, Verónica Gago, Ileana Arduino, Dana Rosenzvit, La Negra Quinto y el Colectivo Juguetes Perdidos.

04

“LOF LAFKEN WINKUL MAPU: el contra-relato del enemigo interno

Lof Lafken Winkul Mapu es una comunidad Mapuche que está recuperando su territorio ancestral en lo que hoy se conoce como Argentina. A raíz del despojo producido por el Estado, los integrantes de la comunidad vivían dispersos en barrios populares de Bariloche, hasta que un día se organizaron para volver a su tierra, a reconstruir su conocimiento, su lengua, sus ceremonias, a vivir como Mapuche. En esa tierra, se levanta una machi, una autoridad del pueblo Mapuche que no aparecía en el Puel Mapu desde hace casi cien años. En esa tierra, el 25 de noviembre de 2017, las fuerzas represivas del Estado asesinaron por la espalda a Rafael Nahuel. El asesinato, hasta el día de hoy, sigue impune. 

Caminando por el Puel Mapu llego a Lof Lafken Winkul Mapu. Invito a sus integrantes a escribir un libro conmigo. Me hablan y escribo a mano todo lo que dicen. Nada se graba. Cada vez que hacen una pausa para respirar, paso a la línea que sigue. Son diez personas que se intercalan al hablar, es una voz, una voz comunitaria. Al otro día, imprimimos el texto y lo leemos en voz alta en una ronda de ocho troncos alrededor de un fuego. Cada persona tiene una copia del texto y una lapicera. Corregimos colectivamente, llegamos a una versión final y mandamos los libros a imprenta. 

De cada tirada de impresión, la mitad de los ejemplares son para que Lof Lafken Winkul Mapu distribuya dentro del territorio Mapuche, donde hicimos presentaciones de lectura en voz alta en distintas comunidades, pueblos y ciudades. La otra mitad de los ejemplares son para que Reunión las distribuya afuera del territorio Mapuche. El libro cuenta también con una versión digital de descarga gratuita y está siendo traducido a diversos idiomas.

05

“TERREMOTO: el presente esta confuso

El diecinueve de septiembre de dos mil diecisiete ocurrió un sismo de siete punto uno grados en la escala de Richter a las 13:14:40 horas en la Ciudad de México. El epicentro del evento telúrico fue en Puebla-Morelos a ciento veinte kilómetros de la Ciudad de México. El sismo ocurrió el mismo día que el de mil novecientos ochenta y cinco.

Dani Zelko llegó de Buenos Aires a la Ciudad el veinticuatro de septiembre, cinco días después del sismo. En los días siguientes, Daniel montó una mesa con su computadora y una impresora que es una mochila — es decir, una impresora portátil — en diferentes calles de las colonias Buenos Aires, Roma Sur, Obrera y Tacubaya. Se sentó y esperó. Detrás suyo había carteles que decían: “Acopio de memorias”, “Háblame y léete”, “Cuenta tu historia hoy” y: “EL PRESENTE ESTÁ CONFUSO”.

Las personas que pasaron le dictaron poemas a Daniel. Se acercaron a decirle algo espontáneamente. Daniel escuchó, transcribió estos poemas, y los imprimió al momento. Les leyó a las personas sus poemas y se los regaló. Las personas que participaron tienen entre tres y sesenta años de edad. Las personas al escuchar sus poemas asentían: “Sí, eso pasó, así fue”, como si alguien más hubiera vivido eso o alguien más lo hubiera relatado. Como si la distancia de leerse en la voz de otro, de leerse en ese instante, pudiera dar cabida a ese relato y a lo vivido, en donde la memoria es por un momento congruente con el temblor del cuerpo, y paradójicamente un recuerdo.

Gonzalo Lagos conversa con Dani Zelko.

Hacia una dimensión político sensible de la escucha. REUNIÓN como expresividad poética de los testimonios.

GL: Me gustaría comenzar mapeando esta conversación teniendo en cuenta tres aspectos presentes en tu proyecto. Uno tiene que ver con el pasado reciente, ligado a un hecho traumático que relatan quienes prestan su voz y comparten sus historias, una fragilidad silenciada que necesita ser visibilizada. Por otro lado, situados en el presente, donde ese relato condensa las imágenes que atravesaron esas personas, esos cuerpos. Y por último el futuro, cuando esa voz circula y se integra en otros contextos, permitiendo la apropiación de las historias por otras personas, tocando otros espacios, otros contextos. ¿Cómo creés que esta documentación y este procedimiento pueden actuar en un sitio de Arte y Memoria como lo es el Parque, considerando que tu práctica escrita a su vez es una práctica de memoria?

DZ: Es cierto que estos relatos cuentan situaciones que sucedieron antes, que se encarnan en un tiempo presente, y que esa materialización produce efectos de ahí en adelante. Pero creo también que en esos días compartidos de hablar, escribir, corregir, imprimir, leer, repartir, tan intensos y breves, se arma una ensalada de temporalidades en la que el tiempo deja de ser lineal, o mejor dicho que el tiempo deja ver que no es lineal. Y así deja de ser personal y puede volverse común. Quizás esta mezcla temporal es una cualidad indispensable de toda práctica de memoria. Porque lo que nos sucedió nos sucede, y de ahí la necesidad y la posibilidad de inventar gestos, espacios, objetos, acciones y situaciones a través de los cuales damos forma a enseñanzas, heridas, violencias e intenciones para que puedan llegar a otrxs, para que puedan construir un nosotrxs imprevisto. Así estos encuentros y estos libros se convirtieron, según el caso, en proceso de duelo, en organización de una disputa política, en espacio de celebración comunitaria, en caja de herramientas para ver cómo seguir luego de un temblor, en regalo de cumpleaños, en ritual para juntar fuerza y cruzar una frontera. Creo que la memoria, cuando se hace práctica, deja de ser un puente al pasado y permite reunir fragmentos de tiempos diversos para componer un tiempo otro. ¿Y cómo construimos, en una época de tiempos tan acelerados e hiperestimulados, prácticas de memoria que accionen con urgencia pero sin inmediatez? ¿cómo construimos prácticas que puedan intervenir con urgencia cuando algo sucede, pero sin reproducir las temporalidades y formas de encuentro reactivas que propone la época?

Con respecto al Parque, me parece un espacio importante y agradezco que esté. También valoro que estemos pensando puntos de contacto entre el Parque y Reunión porque como bien decís, ambos son proyectos o espacios para la memoria, hacia la memoria, desde la memoria, con la memoria. Y también me parece valioso unirnos para hilar fino en algunas diferencias o problemas. Por ejemplo, el Parque es un espacio estatal y por lo tanto es un ejemplo concreto de cómo algunas prácticas de memoria, en este caso las surgidas durante y a partir de la última dictadura, son incorporadas al discurso del Estado. En el caso de las memorias que se escuchan en Reunión, son prácticas de memoria que el Estado y la historia y los medios de comunicación no cuentan, o que no cuentan todavía, o que cuentan tergiversadamente para construir un sentido común que legitime sus estructuras de poder y su uso de la violencia. En ese sentido, desde que entré en contacto con Lof Lafken Winkul Mapu y con Soraya Maicoño tengo la sensación, cada vez más clara, de que hay algunas prácticas de memoria que obturan otras. De que hay algunas construcciones discursivas que, por más imprescindibles que sean, obturan otras. Y me parece que atender a esas tensiones incómodas nos puede ayudar a hacer espacio para seguir ampliando y expandiendo lo que entendemos como memoria, como resistencia, como verdad, como justicia, como terrorismo de estado.

GL: Con el decreto de Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio todo el procedimiento de Reunión se ve imposibilitado de realizar. Existe un antagonismo en su propia esencia: la urgencia en la calle, la presencia entre dos cuerpos que se encuentran y conversan. ¿Podrías contar de qué manera el procedimiento tuvo que ser alterado en el caso de Razib, Afroza y Elahi —migrantes que nacieron en Bangladesh y que ahora viven en Madrid— al no poder estar vos presente debido a la crisis sanitaria por el Covid-19?

DZ: Cuando salió el decreto, lo abrí y lo leí. Luego abrí el procedimiento de Reunión, partí la pantalla de la computadora y los puse al lado. Los miré simultáneamente. El yin y el yang. Imposible. Nada de lo que hace Reunión se podía hacer. Dije, bueno, después de cinco años de tanto movimiento llegó el momento de bajar un cambio. Me costó pero lo decidí y traté de sostener esa decisión. Y una mañana Ana Longoni me llama y me cuenta que un migrante de Bangladesh había muerto de coronavirus, en su casa, después de llamar a los servicios de salud y emergencia por seis días. Que no hablaba bien español y entonces no se había podido entender con quienes atendían los teléfonos. Que en seis días nadie lo había asesorado ni lo había ido a ver. Que la comunidad estaba tratando de entender y de dar a conocer lo que había sucedido. Yo iba a estar en Madrid en esos días y me tuve que volver de urgencia de un día para el otro, así que de alguna manera mi cuerpo había quedado dividido entre acá y allá. Y se nos hizo evidente que hacer un libro podía servir. Yo les dije que por supuesto que contaban conmigo, que los ayudaba en lo que pueda. Yo en serio sentía que eso no era parte de Reunión simplemente porque ninguno de los pasos del procedimiento se podía llevar a cabo. Así que creo que les dije literalmente eso, “lxs ayudo”, que ahora que lo pienso me parece horrible, porque justamente este proyecto se trata de buscar tecnologías de reciprocidad, nunca queda claro qué estamos dando, qué estamos recibiendo, qué conocimientos se están juntando, qué reverberaciones vamos a producir juntxs. Pero bueno, empezamos. Decidí que escribamos por teléfono, ni videollamada ni imagen, solo voz. Fue una reafirmación de una fe constitutiva de este proyecto: que las voces transportan presencias. Cuando hice el primer llamado automáticamente me puse a escribir a mano, que es lo que siempre hago. Pero lo sentí raro, porque lo de que se escribe a mano y que está prohibido grabar sirve para que la otra persona vea cómo las palabras que va diciendo se traducen a escrito en el momento, para que el cansancio de la mano después de escribir varias horas le haga saber a la otra persona que lo que está diciendo es importante y que está siendo escuchada con atención, para que esos dos cuerpos dejen por escrito esa oralidad sin tener un aparato en el medio. Bueno, claramente nada de eso estaba sucediendo. Así que agarré la computadora y me puse a tipear. Y me pareció todavía más estúpido. Y ahí le pedí a Elahi que pare de hablar, que me dé unos minutos para entender cómo hacer. Cortamos y ahí entendí que lo tenía que grabar, que la intensidad de mi cuerpo tenía que estar completamente absorta en la escucha, como si de esa manera mi cuerpo pudiera viajar hasta España y estar sentado al lado de la persona que hablaba. Lo volví a llamar y seguimos de esa manera y ahí sí. Hice algunas preguntas y emití algunos sonidos onomatopéyicos para acompañar a la otra voz, para hacerle saber que seguía ahí, escuchando. Porque no hago preguntas pero siempre siempre muevo los hombros, hago muecas, gestos, me río, me tambaleo… y todo ese lenguaje del cuerpo, esa suerte de coreografía de compañía para la voz que habla, ahora pasaba a ser sonido, sonidos del otro lado del teléfono. Cuando terminó desgrabé el texto bien rápido, me daba abstinencia que lo que me acababan de decir no estuviera escrito. Respeté como siempre las inhalaciones para el corte de verso, y una vez que lo terminé, borré el archivo de audio. La computadora me preguntó, “¿Está seguro de que desea borrar el archivo?”, no estaba seguro pero rápidamente puse que sí y escuché el sonido que hace la computadora cuando un archivo es enviado a la papelera de reciclaje. En ese momento entendí que lo que estaba haciendo sí era Reunión y me sentí mal por haberme pasado tantos días pensando si eso “iba a ser parte de la obra” o si “me estaba auto-explotando en un momento en que necesitaba frenar” o si “estaba traicionando al procedimiento al sumarle todas esas limitaciones ajenas”. El procedimiento es lo suficientemente específico para ser siempre el mismo y lo suficientemente versátil para poder escuchar las situaciones en las que se mete y a partir de ellas cambiar lo que haga falta. Y ahí empecé a hacer los otros llamados, a Afroza, a Razib, y me conmovió escuchar la voz de una comunidad migrante que reconoce a la lengua como una cuestión de vida o muerte, la voz de una comunidad migrante que a partir de la muerte de un paisano dijo basta y empezó a organizar una disputa por el derecho a vivir en su lengua. La forma en que estas personas me hablaban de su lengua… la forma en que me contaban que los movimientos por la lengua que su pueblo fue armando lxs acompañan donde sea que vayan… la forma en que decían, con toda simpleza, que la lengua es una forma de vivir. Estábamos unidxs, estábamos cerca, más allá de cualquier decreto, más allá de cualquier limitación lenguajística, más allá de cualquier distancia geográfica.

GL: ¿Cuales son los aspectos que problematiza y de los cuales se ocupa Reunión? ¿En qué crees que hay que continuar insistiendo y qué aspectos deberían modificarse  frente al miedo que actualmente se propaga: al espacio público, a lxs otrxs, a la presencia física? Por último, ¿qué sucede con esos cuerpos que se juntan y traducen materialmente Reunión en relación a las “Ediciones Urgentes” que aquí presentamos?

DZ: Es extraño, a veces cuando hablamos de lo que problematiza una obra nos referimos a lo que nos preocupa y a veces a lo que nos fascina, ¿no? Y de a ratos lo que nos preocupa y lo que nos fascina se juntan. Y quizás eso es lo que pasa en estas “Ediciones Urgentes”. Pero empecemos desde el principio. Reunión comenzó siendo al azar, invitaba a escribir a cualquier persona, de cualquier edad, de cualquier lugar. El procedimiento empezó ocupándose de fascinaciones e intrigas: ¿cómo se escribe de a dos? ¿cuál es el grado cero de un libro? ¿qué relaciones se dan entre cuerpo y escritura? ¿cómo marear la noción de autoría? ¿qué diferencias hay entre hablar y escribir? La fascinación de ver palabras cambiando de materialidad al atravesar cuerpos, las ganas de escuchar y dejarse enseñar, la excitación de imprimir y regalar sin pedir permiso, la fe en que los libros transportan presencias y que los encuentros que suceden entre persona y libro son tan valiosos como los que suceden entre persona y persona, la emoción de entablar amistades duraderas con personas desconocidas, la convicción de que el conocimiento que nos llega no alcanza y hay que salir a buscar otros.

En 2017 el procedimiento ya estaba funcionando, los pasos a seguir estaban pulidos, los libros funcionaban por sí mismos, las rondas de lectura se prendían fuego. Y la cosa se empezó a poner cada vez más tensa: Macri, Temer, Trump, terremotos, éxodos, doctrinas represivas, desapariciones forzadas… y fue inevitable empezar a usar este procedimiento para intervenir en situaciones concretas, y a veces con objetivos bastante concretos también. Eso implicó asumir otros riesgos, equivocarse más seguido, entrar en tensión con muchas de mis propias visiones de cómo hacer arte y sacar a la superficie nuevas contradicciones. Y esas contradicciones resultaron ser maestras, motorizaron mucho más de lo que paralizaron, y fueron trayendo incomodidades que dieron mucha data de cómo y por dónde seguir. De alguna forma extraña, recién cuando el procedimiento se metió con problemáticas muy reconocibles a simple vista como “políticas” fue que entendí que la politicidad del proyecto, desde el principio, radica en una serie de decisiones formales que hace que estos libros y estas situaciones se hagan de una manera y no de otra. Una serie de decisiones que aparecen como limitaciones y que son forma: se escribe con personas desconocidas, nada se graba, se escribe a mano todo lo que dicen, no se hacen preguntas, no se saca tema, no se edita posteriormente, los libros se presentan en la calle, se leen en voz alta y se regalan.

Pero bueno, es evidente que en las “Ediciones Urgentes” pasan a primer plano una serie de problemáticas que no eran nuevas hace tres años, que no son nuevas ahora, y que cada vez se exacerban más: la construcción de enemigxs, el despliegue de políticas del miedo que legitimen esa construcción, el destierro del cuerpo físico ante la hiperestimulación informática, la embestida contra el espacio público, contra toda visión de lo público, contra toda forma de encuentro u organización comunitaria o colectiva. Podríamos seguir la lista por horas. Y la cuestión es que estas estrategias que va adoptando y recrudeciendo la gestión neoliberal de la vida producen (y se sostienen en) violencias estructurales, que de alguna forma condicionan a la sociedad toda, pero que están claramente dirigidas de forma directa a grupos de personas, a formas de vida y a territorios concretos. En las “Ediciones Urgentes” Reunión se acerca a algunas de estos territorios, a algunas de estas comunidades, a algunas de estas personas. No solo para materializar una forma de contarlas o visibilizarlas, sino también, y sobre todo, para proponer una serie de prácticas conjuntas, encuentros íntimos y situaciones públicas donde volver a atravesar lo que pasó, entender lo que pasa, escucharlo, organizarlo, darlo a conocer, moverlo, desarmarlo, conjurarlo.

Es imposible hablar de estas personas, de estas comunidades y de estas situaciones de forma general, cada una es muy valiosa y particular, así que es mucho más enriquecedor abrir los libros y escuchar sus voces que leerme a mí hablando sobre ellas. Pero para tratar de contestar a tu pregunta por los cuerpos en estas últimas ediciones, si algo me queda claro es que ya no es posible negar la violencia, que no es posible hablar de “no violencia” en un mundo como este, y que entonces se inventan constantemente formas de dar vuelta las violencias estructurales y volverlas otra cosa, violencias resistentes, contra-hegemónicas, reparatorias, defensivas, que preserven y reproduzcan vida. Muchas de las personas y las comunidades que hablan en estos libros lo están haciendo. Y lo pasan por esta especie de máquina hecha de sustancias frágiles, y atraviesan cuerpos, voces, papeles, palabras, encuentros, con el deseo de construir otras memorias, otras justicias, otras imaginaciones.

Dani Zelko

Argentina, 1990.
danizelko@gmail.com
www.reunionreunion.com

Su obra está hecha de palabras y personas, que se juntan a través de diversos procedimientos para generar encuentros, publicaciones y acontecimientos en los que las tensiones políticas y los experimentos del lenguaje se retroalimentan. Publicó muchos libros, entre ellos los que aquí se comparten. Algunos fueron traducidos al inglés, al portugués, al alemán, al francés y al italiano. Realizó exposiciones en museos y espacios de arte independientes de varios países de América y realizó colaboraciones con espacios como Museo Nacional Reina Sofía (España) y Bikini Wax (México). Se desempeña como docente de arte y es parte del Proyecto Secundario Liliana Maresca en Villa Fiorito. Se formó con Diana Aisenberg y en el Centro de Investigaciones Artísticas.

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Museo del Neo-Extractivismo (MNE)

del colectivo Etcétera

Lxs invitamos a realizar una visita virtual por el Museo del Neo-Extractivismo (MNE), del colectivo Etcétera, integrado por Loreto Garín Guzmán y Federico Zukerfeld.  

El MNE es un proyecto nómade que adopta diversos formatos expositivos según el espacio, institución y contexto al que se desplaza. Surgió a partir de una investigación  acerca del modelo neoextractivista y sus consecuencias para el medio ambiente, la salud social y los derechos humanos. 

El montaje en la sala PAyS del Parque de la Memoria se basó en el prototipo de una de sus posibles salas e incluyó instalaciones, obras de sitio específico, fotografías, videos, objetos y mapas, entre otros materiales. Asimismo, el MNE presentó algunas perfomances e intervenciones en los alrededores del Parque de la Memoria.

Durante la exposición, el colectivo Etcétera realizó este registro en 360 grados, donde podemos ver un recorrido por el MNE.

El MNE formó parte de El futuro de la memoria, un proyecto concebido por el Goethe-Institut a través de sus sedes en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Uruguay, con el fin de alentar el diálogo regional entre sitios de memoria y la reflexión sobre el abordaje de la memoria política desde una perspectiva artística.

En el año 2018 el Parque de la Memoria fue sede del capítulo Argentino del proyecto y participó de su desarrollo conceptual conjuntamente con el Museo Sitio de la Memoria ESMA.

Registro en 360 grados, un recorrido virtual por el Museo del Neo-Extractivismo (MNE)colectivo Etcétera, 2018.

Galería de imágenes

Habeas Sonus

de Mariano Speratti

Esta obra de Mariano Speratti indaga sobre las posibilidades de restituir la memoria a partir del sonido. Speratti nos sitúa en el año 2076 e imagina un futuro en el que ya no hay adultos y son lxs niñxs quienes administran la memoria y develan archivos sonoros del pasado. En clave de ciencia ficción, accedemos a fragmentos sonoros de spots publicitarios producidos por agencias para la Junta Militar del 76.

Junto a este video, el artista presenta cuatro archivos sonoros que integran la sección “Rescates de la Oficina de la Memoria”. Estos “rescates” son testimonios orales de personas que vivieron su niñez, adolescencia o juventud durante la última dictadura cívico-militar en la Argentina, y traen a la memoria recuerdos de esa época a partir de una pregunta: ¿qué elementos sonoros mandarías al futuro para reconstruir lo que se vivió en aquellos años?

Así, la obra de Mariano Speratti propone abordar el sonido como un testimonio ineludible, conectando con la sensibilidad de la memoria auditiva y los universos sonoros que dejan marcas en el tiempo, tanto en la historia personal como en la colectiva. 

La videoinstalación formó parte de El futuro de la memoria, un proyecto concebido por el Goethe-Institut a través de sus sedes en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Perú y Uruguay, con el fin de alentar el diálogo regional entre sitios de memoria y la reflexión sobre el abordaje de la memoria política desde una perspectiva artística.

En el año 2018 el Parque de la Memoria fue sede del capítulo Argentino del proyecto y participó de su desarrollo conceptual conjuntamente con el Museo Sitio de la Memoria ESMA.

Oficina de la Memoria

Estado de Buenos Aires, Argentina

La Oficina de la Memoria, en el Centésimo Aniversario del Golpe de Estado del 24 de Marzo de 1976, y dentro del marco de la ReConstitución, hace públicos los siguientes archivos desclasificados.

Estos elementos, hallados bajo tierra, fueron exhumados por operarios de la sección Rescates de la Oficina de la Memoria. Los materiales datan del año 2018, y si bien su contenido original no ha sido alterado ni modificado, se sustrajeron las imágenes que los acompañaban, en cumplimiento del Tratado de No Proliferación de Imágenes suscripto por el Estado de Buenos Aires en el año 2068.

Se desconocen datos de autoría, si su autor fue un individuo aislado u organización de algún tipo, y cualquier dato sobre sus posibles motivaciones entra en el terreno de la mera conjetura.

Es dado arriesgar, sin embargo, que, en vistas del amenazante contexto en que fueron generados, se tratara de algún tipo de maniobra de salvataje preventivo.

Los siguientes cuatro son los primeros de una serie de archivos desclasificados que la Oficina de la Memoria irá poniendo sucesivamente a disposición de la ciudadanía.

© Daniela Patané

El futuro es nuestro.
OFICINA DE LA MEMORIA, 2076.